Estas dos formaciones, socias en la coalición Izquierda-Ezkerra, se encuentran en conversaciones para reeditar el acuerdo organizativo suscrito por ambas formaciones políticas hace ocho años, según señala Batzarre en un comunicado, en el que valora de forma «positiva» su andadura conjunta.

En este sentido, destaca que Izquierda Ezkerra ha logrado una «identidad propia y diferenciada dentro del espectro político en Navarra, en el Parlamento y también en diversos ayuntamientos, como Pamplona o Tudela».

Batzarre considera que el acuerdo suscrito, que caduca en 2019 ha de ser revisado, y en este sentido subraya su apuesta por un «modelo de coalición plural y abierto», tal como aprobó la semana pasada el Consejo Político de Batzarre, órgano de decisión entre asambleas.

Por otra parte, entiende que tanto el contexto social como el escenario político han experimentado en estos ocho años, cambios profundos e importantes, entre ellos la irrupción de nuevos partidos políticos.

Su propuesta, según detalla, persigue «consolidar y mejorar la buena dinámica de trabajo conjunto y coordinación que ha existido entre ambas formaciones», ya que, a su entender, esa es la vía para resolver las discrepancias que han tenido en temas como la lista única o la prostitución y que en la actual legislatura se han solventado con posicionamientos por separado.

Al respecto, indica que la presencia de Batzarre en el grupo parlamentario (I-E pasó de tres representantes en 2011, dos por IU y uno por Batzarre, a dos en 2015, ambos de IU) «reforzaría esa necesaria coordinación».

Por todo ello se muestra favorable a reeditar la coalición, «más fuerte si cabe, con candidaturas solventes y plurales», en la que todas las partes se sientan «cómodas y con ilusión de seguir compartiendo y construyendo este proyecto común» para, a partir de ahí, ampliar la coalición a otras fuerzas políticas donde sea posible.