Ramón Sola

‘Amaren etxea’, testimonio del dolor y del amor de los familiares de presos

Un centenar de testimonios recogidos en trabajo de hormiga y mezclados con sapiencia de costurero por Jokin Urain conforman ‘Amaren etxea’, presentado esta tarde en Donostia. Da fe por vez primera de qué viven, qué sienten, qué padecen y con qué se ilusionan los familiares de los presos políticos vascos. Es el retrato de una «escabechina», en palabras de uno de ellos, pero también una inmensa historia de amor.

Y la semilla de este libro está precisamente el día en que Urain salió de la cárcel de Herrera y puso rumbo a casa. «Tenía unas ganas increibles de llegar, así que el camino se me hizo interminable, eterno, e inmediatamente pensé cómo no se les haría de largo a los familiares que hacen tantos y tantos viajes así», ha explicado en la sala llena del Museo San Telmo. Dicho y hecho, en los últimos años ha recogido un centenar de testimonios, de modo oral o escrito, además de extractos de entrevistas de prensa que componen este mosaico.

«Muchos de los testimonios son dolorosos –admite en el prólogo Jokin Urain–­, voces del sufrimiento, de la impotencia, del llanto y de la alegría. Pero por encima de todo son voces de la esperanza y del amor». En la presentación ha recordado cómo uno de estos familiares le dijo en una conversación telefónica que «lo que nos hacen es una escabechina», y efectivamente el libro recoge esa parte dramática ­-«la de los familiares es una gran épica»– pero también constituye una recopilación de cariño, solidaridad y cooperación que deja «momentos sublimes» en palabras del editor, Fermin Munarriz.

Las conversaciones se han estructurado en bloques temáticos, formando historias propias. Algunas situaciones son muy reconocibles por lo concreto, como «El vis a vis», «Viaje sin retorno, morir en la carretera», «Mirentxin» o «Nacer en la cárcel». Otras, en cambio, resultan más etéreas pero igualmente reales: «Euskal Herria, el hogar, es Itaca», «La vida no se detiene», «Territorio de nuevas relaciones y amores» o «Las huellas en el camino».

Destaca, desde el propio título del libro, la potente figura de la madre de la persona presa. «Es una figura universal», recuerda Urain citando el impresionante libro de Maximo Gorki, la lucha de las Madres de Mayo, la canción de Atahualpa Yupanqui a su madre vasca y, cómo no, las amatxos de Etxerat. «El libro no podría tener otro título», ha asegurado el autor.

Junto a él se han sentado tres personas con diferentes perfiles que representan la pluralidad de las vivencias de los familiares. Belén Aurrekoetxea, por ejemplo, ha conocido la prisión primero en carne propia, luego como madre y ahora como abuela. En su intervención ha detallado las diferentes fases por las que pasa una familiar, desde el shock inicial por la huida o la detención a los durísimos días de la comisaría, después la toma de conciencia de que la prisión ha llegado para quedarse y, finalmente, la asunción de lo inevitable: «No te acostumbras, pero aprendes a vivir con ello».

Olatz Iglesias comenzó a entrar en prisión cuando a su madre la detuvieron; tenía solo nueve meses, era un bebé. Luego fue encarcelado también su aita; con seis años, Olatz tenía que viajar un fin de semana al mes a París y otro a Madrid. Hoy tiene ya 22 pero sigue sufriendo el alejamiento de su aita: «Lo más difícil es tener una relación normalizada con quien está dentro. Si en vez de en Villena estuviera en Zaballa, o si las conversaciones no estuvieran intervenidas, todo sería más fácil», ha apuntado.

Patricia Velez, igualmente familiar y además portavoz de Etxerat, ha cerrado la presentación destacando el doble valor de este libro: «Para quienes no padecen esto, conocerlo será enriquecedor; y para quienes sí lo han sufrido o lo sufren, da trascendencia a esta realidad y es importante también para sentirte reconocido. Nos servirá para avanzar».

‘Amaren etxea´ podrá adquirirse a través de Naiz Denda antes de llegar a Durango y a los kioskos. La versión original de Urain es en euskara, pero también sale a la calle en castellano, todo ello de la mano de la editorial Astero.