NAIZ
IRUÑEA

Los jóvenes de Maravillas niegan haber deteriorado el edificio, que han cuidado «desde el cariño»

Con una concentración en la plaza Nabarreria, en las mismas puertas del gaztetxe, los miembros de Maravillas han negado haber «dejado en mal estado el edificio», que estuvo «abandonado durante más de 20 años», y han subrayado que lo que han hecho es «desde el cariño», cuidar «este espacio para preservar el patrimonio», el cual «no han dudado en reventar a golpe de hormigón armado». 

Concentración a las puertas del Gaztetxe Maravillas. (@ibaiazparren)
Concentración a las puertas del Gaztetxe Maravillas. (@ibaiazparren)

En un comunicado previo a la concentración que se ha llevado a cabo este jueves frente al gaztetxe, han destacado que en el edificio «no se han realizado mas que trabajos de limpieza y readecuación de varias zonas, reformando varias de ellas para desarrollar distintos proyectos y cerrando todas aquellas partes que pudieran suponer un mínimo riesgo para las personas».

«Se nos acusa a nosotras, integrantes del Gaztetxe Maravillas, de haber dejado en mal estado el edificio, cuando dicha responsabilidad recae totalmente sobre aquellos que lo mantuvieron abandonado durante más de 20 años y sobre aquellos que cerraron todas las puertas al diálogo para resolver este asunto», denuncia en el comunicado.

En este sentido, los portavoces del gaztetxe han asegurado que, «desde el cariño, hemos cuidado este espacio para preservar el patrimonio, patrimonio que no han dudado en reventar a golpe de hormigón armado, tapiando las puertas, levantando los suelos y destruyendo todas las salas que habíamos rehabilitado para el uso popular».

«Podrán destruir nuestros edificios, podrán poner muros de hormigón y desalojarnos con la mayor represión posible. Pero lo que nunca conseguirán, jamás de los jamases, es desalojar nuestras ideas», han subrayado.

Por ello, han destacado que la concentración tenía como objetivo «denunciar este atropello, para denunciar y decir alto y claro, que aquí, el único que ha destruido y cerrado el edificio, ha sido el Gobierno de Navarra».