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Madrid

El teniente coronel Baena declara que Catalunya «era un polvorín con clima insurreccional»

El teniente coronel de la Guardia Civil Daniel Baena, que lideró la investigación policial del 1-O, ha calificado como «periodo de insurrección» el comprendido entre el 20 de setiembre de 2017 y el día en que se aplicó el artículo 155, el 27 de octubre. Baena ha negado ser titular de la cuenta de Twitter @nmaquiavelo1984, desde la que se criticó e insultó a Mossos y a líderes independentistas.  

El tirbunal, durante la sesión de este martes.
El tirbunal, durante la sesión de este martes.

Daniel Baena, jefe de la policía judicial de la Guardia Civil en Catalunya, declara como testigo en el Supremo y ha expuesto su versión de lo que se vivió entre el 19 y 20 de setiembre, cuando se produjeron numerosos registros para impedir el 1-O, y el 27 de octubre, día en que se aplicó el artículo 155 de la Constitución española para intervenir la autonomía catalana.

A preguntas de la fiscal Consuelo Madrigal, Baena ha calificado varias veces esos días como un «periodo insurreccional. Aquello literalmente era un polvorín. Los policías que teníamos un mínimo de responsabilidad sabíamos que cualquier incidente pequeño podía derivar en una escalada incontrolable y afortunadamente no fue así», ha subrayado.

Baena estuvo al mando de la investigación sobre la preparación del 1-O dirigida por el juez de instrucción 13 de Barcelona y también elaboró informes sobre el procés para la Fiscalía de la Audiencia Nacional y la jueza de este tribunal Carmen Lamela, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya y el magistrado del Supremo Pablo Llarena.

A este teniente coronel se le atribuyó un perfil de Twitter desde el que se lanzaron comentarios políticos beligerantes con el independentismo, un asunto por el que le ha preguntado el abogado de Oriol Junqueras.

Se trataba de la cuenta @nmaquiavelo1984 con el pseudónimo Tácito –ya borrada–, desde el que se criticó a dirigentes políticos catalanes. «No soy propietario de esa cuenta», ha asegurado.

Este mismo abogado le ha preguntado si detectó mensajes de Junqueras y otros acusados incitando a la violencia y ha reconocido que no lo hacían, y también ha admitido que los lemas independentistas llamaban al civismo y al pacifismo.

Tres periodos diferentes

Antes, a preguntas de la fiscal, Baena ha asegurado que hubo tres periodos claramente diferenciados en Catalunya. El primero fue antes del 19 y 20 de setiembre, cuando las concentraciones contra las fuerzas de seguridad eran en tono de protesta, pero luego vino lo que ha definido como un «periodo insurreccional», que se produjo entre esos días y la aplicación del artículo 155. El último fue a partir de esa fecha, cuando cesaron las protestas.

En los días del «periodo de insurrección», ha dicho, hubo un «cambio radical» en la actitud de la gente y se produjeron los «asedios» y «escraches» a la Guardia Civil y la Policía española. Según el responsable de la investigación, el ambiente «insurreccional» desapareció al aplicar el artículo 155, cuando hubo otro «cambio radical».

«No hay concentraciones, ya no hay ningún tipo de incidente» porque, por un lado, no había llamadas a la movilización y, por otro, los Mossos hicieron «dispositivos de seguridad muy eficaces».

Preguntado por la investigación de los preparativos del referéndum, ha asegurado que «todo empieza con Artur Mas», con la consulta del 9N, y que su análisis mostró que todas las acciones conducían al referéndum, «la piedra angular sobre la que pivotaba todo un proceso».

A su juicio, «el referéndum no era el objeto en sí», sino una «condición ‘sine qua non’ para la declaración unilateral de independencia o para poner al Estado en una situación de conflicto».