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Bogotá

El ELN decreta un cese al fuego unilateral por Semana Santa en respuesta a la sociedad civil

El ELN ha decretado un cese al fuego unilateral que entrará en vigor este domingo y se extenderá hasta el día 21. Este anuncio se produce después de que la iniciativa Defendamos la Paz, integrada por exnegociadores del Gobierno con las FARC y de la guerrilla y un amplio espectro de la sociedad, pidiese al ELN un cese unilateral al fuego y de hostilidades.

Guerrilleros del ELN en las selva colombiana. (Luis ROBAYO/AFP)
Guerrilleros del ELN en las selva colombiana. (Luis ROBAYO/AFP)

A través de un comunicado fechado el día 11, el ELN ha anunciado un cese unilateral al fuego que entrará en vigor este domingo y se prolongará hasta el día 21 a las doce de la noche, coincidiendo con la Semana Santa. Durante estos días, subraya, «solo responderemos si somos atacados y no realizaremos acciones ofensivas».

Este anuncio se produce después de la carta que la iniciativa Defendamos la Paz –integrada por exnegociadores del Gobierno con las FARC-EP, exnegociadores de esta guerrilla, facilitadores de los diálogos, otras personas que de un modo u otro participaron en las conversaciones y por líderes sociales– dirigió al ELN pidiéndole un cese unilateral al fuego y de hostilidades que «permita avanzar con el objetivo de poner fin al conflicto armado y que ahorre vidas, recursos y sufrimientos en los territorios donde ustedes hacen presencia».

En la misiva lamentan «el retroceso en el proceso de solución definitiva de la confrontación armada, el lamentable recrudecimiento de las hostilidades y los muy dolorosos actos violentos en la capital de la República y en determinadas zonas del país, así como la decisión de cesar las conversaciones que desde hace años venían sosteniendo el Gobierno y el ELN».

«Ese retroceso es deplorable luego de que tras la fase exploratoria y largos ciclos de diálogos se hubiera logrado pactar una agenda y dar los primeros paso hacia un acuerdo de paz», destacan.

En su respuesta, el ELN reitera su decisión de «avanzar hacia la paz, continuar con los diálogos y la mesa de conversaciones y acordar de manera definitiva un cese al fuego bilateral que genere alivios humanitarios para las comunidades más afectadas por el conflicto».

Incide en que «solo una gran presión social y un fuerte movimiento de mayorías por la paz obligará al Gobierno a respetar los acuerdos, a sentarse en la mesa con la insurgencia y a dialogar con las distintas expresiones del movimiento social».

Lamenta que el Gobierno de Iván Duque «sigue sordo al clamor de amplios sectores del país en torno a la continuidad de los diálogos y del proceso de paz, y subestima la espera de nuestra delegación de diálogos en La Habana, las 24 liberaciones realizadas el año pasado y el cese unilateral que cumplimos en Navidad y Año Nuevo, y otro más».

El Alto Comisionado para la Paz del Gobierno, Miguel Ceballos, ha insistido en las exigencias de Duque para reanudar la mesa de conversaciones, es decir, que el ELN «entregue a todos los secuestrados en su poder y cese todas sus actividades criminales».

Sobre este alto el fuego unilateral, ha comentado que «ojalá no sea el presagio de una tragedia».