NAIZ
COLOMBO

El Gobierno de Sri Lanka apunta a un grupo islamista local como autor de los atentados

Las autoridades de Sri Lanka imputan a un grupo islamista local la ola de atentados cometidos este domingo, que se han saldado con 290 personas muertas y más de 500 heridas. La Policía ha detenido a 24 personas a las que interroga con ayuda del FBI.

Estado en que quedó una de las iglesias atacadas en Sri Lanka. (Jewel SAMAD/AFP)
Estado en que quedó una de las iglesias atacadas en Sri Lanka. (Jewel SAMAD/AFP)

Las autoridades de Sri Lanka achacan al grupo National Thowheeth Jama'ath (NTJ) la cadena de atentados del domingo en la que murieron 290 personas y otras 500 resultaron heridas en la cadena de atentados que golpearon tres iglesias y cuatro hoteles y un complejo residencial durante las celebraciones de la festividad cristiana.

Entre los fallecidos se encuenttran al menos 37 extranjeros de al menos siete nacionalidades distintas. El Gobierno ha decretado el estado de emergencia.

Aunque los atentados aún no han sido reivindicados, la Policía apunta a este grupo islamista, pero investiga cómo ha pasado de ser una pequeña organización local que atacaba estatuas budistas a una serie de atentados de esa envergadura y si ha contado con apoyo exterior.

El portavoz de la Policía de Sri Lanka, Ruwan Gunasekara, ha confirmado la última cifra oficial de víctimas mortales en una intervención pública en la que también ha anunciado que 24 personas han sido detenidas y permanecen en custodia policial en relación con los atentados.

Los detenidos están siendo interrogados por la división de investigación criminal de la Policía, con apoyo del FBI y de Interpol.

Sri Lanka vivió ayer un Domingo de Resurrección sangriento cuando se produjeron seis explosiones de forma simultánea hacia las 8.45 hora local (4.45 en Euskal Herria) en tres hoteles de lujo en Colombo y también en una iglesia de la capital, otra en Katana, en el oeste del país, y la tercera en la oriental ciudad de Batticaloa.

Horas después, una séptima detonación tuvo lugar en un pequeño hotel situado a unos cien metros del zoo de Dehiwala, a unos diez kilómetros al sur de la capital, y la última en un complejo residencial en Dematagoda, también en Colombo, durante una operación policial.

Además, artificieros del Ejército de Sri Lanka detonaron también el domingo de manera controlada un explosivo localizado en las proximidades del principal aeropuerto internacional del país. Además, la Policía ha encontrado hoy 87 detonadores en una estación de autobús a medio camino entre los hoteles y una de las iglesias.

Otra explosión

Esta tarde, sen ha registrado una nueva explosión en Colombo cuando los artificieros intentaban desactivar una bomba hallada cerca de una de las iglesias en las que el domingo se produjo uno de los atentados. Aunque no ha habido heridos, la detonación ha provocado alarma entre los vecinos.

En Sri Lanka la población cristiana representa el 7,4 %, mientras que los budistas son el 70,2%, los hinduistas el 12,6 % y los musulmanes el 9,7 %, según datos del censo de 2011.