Pello Guerra

Asiron: «Las negativas a hablar son la negación de la política y una expresión de soberbia»

Después del ofrecimiento de EH Bildu a PSN y Geroa Bai a conformar una mayoría alternativa a la derecha, la situación sigue sin cambiar de cara a la constitución del Ayuntamiento de Iruñea por la negativa de Maite Esporrín a cualquier diálogo con la formación abertzale. Una actitud que el alcalde en funciones, Joseba Asiron, ha criticado ya que «la negativa a hablar y sentarse a negociar son la negación de la política, y una expresión de cierta soberbia».

Asiron ha criticado la nula voluntad de diálogo del PSN. (Iñigo URIZ / FOKU)
Asiron ha criticado la nula voluntad de diálogo del PSN. (Iñigo URIZ / FOKU)

En unas declaraciones ante los medios, Asiron ha señalado que, tras la oferta realizada ayer por EH Bildu para conformar una mayoría frente a la derecha, «no hay cambios de postura por ninguna parte». Sin embargo, ha insistido en que «voy a seguir intentando, hasta el último momento, propiciar una alternativa a la derecha, ya que más allá de la persona que sea investida el día 15, nos estamos jugando la continuidad de las políticas sociales, porque los últimos cuatro años han sido de muchos avances sociales y todo eso es realmente lo que está en juego».

A continuación, Asiron ha destacado que «si antes hubo quien tuvo la tentación de festejar la llegada de la derecha, ha llegado el momento de rectificar». Al respecto ha insistido en la necesidad de «superar los tiempos de los vetos, en los que todo se basaba en líneas rojas». Pero el PSN «sigue empeñado en poner líneas rojas y está cerca de propiciar que lleguen a la Alcaldía quienes en otros lugares están pactando de forma masiva y descarada, con Vox a nivel del Estado». Considera que «si de cordones sanitarios se habla, ahí existe un buen motivo para la reflexión y no tratar de paralizar los avances sociales que se han producido en Pamplona».

Asiron considera que «las negativas a hablar y sentarse son la negación de la política en su mayor expresión y, al mismo tiempo, una expresión de cierta soberbia que quiero pensar que viene inducida desde Madrid, de unos partidos que están sometidos a lo que se les dicta desde Madrid, como si la ciudadanía navarra no fuera mayor de edad desde un punto de vista política».

Por ese motivo, ha reivindicado «el derecho de pamploneses y pamplonesas a decidir nuestro futuro en todos los ámbitos, también el municipal».