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La víctima de ‘La Manada’: «Lo peor no fue la situación vivida, sino todo lo que vino después»

La víctima de la ‘La Manada’ ha celebrado que «por fin» se ha terminado el proceso y ha asegurado que «lo peor no fue la situación vivida, sino todo lo que vino después».

Protesta en Iruñea contra ‘La Manada’. (Idoia ZABALETA / FOKU)
Protesta en Iruñea contra ‘La Manada’. (Idoia ZABALETA / FOKU)

Así lo ha manifestado la joven en una carta publicada por El Programa de Ana Rosa de Telecinco, en la que recuerda los «casi tres años de proceso».

«Ha sido largo, intenso y sobre todo agotador. Lo peor no fue la situación vivida, sino todo lo que vino después», ha relatado la víctima de ‘La Manada’.

El Tribunal Supremo español elevó las condenas para los cinco acusados a quince años de prisión por un delito continuado de violación con las agravantes específicas de trato vejatorio y actuación conjunta de dos o más personas, admitiendo así parcialmente los recursos de la Fiscalía, la víctima y las acusaciones populares que ejercen el Ayuntamiento de Iruñea y el Gobierno de Nafarroa.

«Llegado este momento puedo asegurar que valió la pena y poco a poco voy recuperando el timón de mi vida», ha explicado la joven, quien ha afirmado que no puede haber sido «más afortunada» con la «calidad» de las personas que la han ayudado.

Entre ellas, ha destacado al juez de instrucción que «nunca» dudó de ella; al abogado que le «tocó aquel 7 de julio de 2016»; la fiscal; los médicos; la policía; los psicólogos; y la pareja que la encontró. La joven ha incidido en que no hay que olvidar que «la lucha debe seguir». «Debemos ser el cambio que quiere la sociedad. Recordad, contadlo, no les dejéis ganar a ellos», ha sentenciado.

«Son momentos en los que nadie sabe cómo actuar pero vosotros lo hicisteis fácil», ha subrayado la víctima de 'La Manada', al tiempo que ha dado las gracias también a Iruñea y a Nafarroa «que con todo su empeño han hecho más fácil que alguna vez» pueda volver. «Gracias por no haberme dejado sola, os estaré eternamente agradecida pero yo no soy ninguna heroína. La fuerza para continuar muchas veces me la ha dado todo el calor y apoyo que he sentido en este camino», concluye la carta.