Mikel Zubimendi

Nueva conquista del cielo: presentan en Donostia el aerotaxi del futuro

El futuro de la movilidad urbana mira al cielo. Los ojos de los ingenieros brillan de ilusión, esa es la tecnología clave en el desarrollo de vehículos voladores y la presentación de los primeros prototipos que ya son un hecho. Euskal Herria no se queda atrás en esa nueva conquista de los cielos y es protagonista en esta revolución.

El equipo de ingenieros de Tecnalia despegando el aerotaxi. (Andoni CANELLADA /FOKU).
El equipo de ingenieros de Tecnalia despegando el aerotaxi. (Andoni CANELLADA /FOKU).

Por supuesto que se necesitan complejísimas tecnologías de software de control, de navegación autónoma, de análisis de colisiones, inteligencia artificial y ciberseguridad, pero ese brillo, esa ilusión de los que imaginan, idean y materializan ese nuevo futuro, que ya no es ciencia ficción, es la energía necesaria para demostrar que la mejor forma de decir es hacer, que el futuro tienen más que ver con el lugar que con el tiempo.

Los aerotaxis urbanos (también conocidos como los eVTOL, del inglés electric Vertical Takeoof and Landing) llaman a la puerta, pero los desafíos aún persisten. A nivel de autonomía, sistemas de seguridad de la aeronavegabilidad y la gestión del ruido hay mucho que mejorar antes de que su utilización se generalice. También serán necesarias nuevas legislaciones que supervisen esta industria emergente. Sin embargo, su desarrollo es imparable y todo hace indicar que entre 5 y 7 años serán una realidad global. Entre los años 2030 y 2035, entre el 60% y el 70% de la población mundial se concentrará en las grandes ciudades, pero los complejos problemas de saturación y de gestión de tráfico tendrán una nueva alternativa.

Carreteras virtuales o corredores celestes sobre la megaciudades en los que circularán aerotaxis eléctricos, como ya lo hacen los patinetes o los autobuses eléctricos, una aeronáutica de nueva generación que dará respuesta a la necesidad de una transición energética y de movilidad. Una industria, la de los servicios con drones, que ha día de hoy tiene el mismo volumen global que el de la máquina herramienta (120.000 millones de euros), y que en ciudades concretas (Singapur, Dubai, Dallas, Tokio, Los Ángeles…) ya está realizando pruebas reales con pasajeros.

El centro tecnológico Tecnalia ha presentado en Donostia el fruto de una década de investigaciones sobre la electrificación de la aeronáutica, situándose en el podio europeo, en el tercer puesto, del desarrollo del aerotaxi. Japón, EEUU, China y Europa son los cuatro polos donde se están experimentando diferentes prototipos y la antena de Euskal Herria ya tiene su propio prototipo.

Un vehículo diseñado para el traslado de una persona, aunque podría llevar hasta cuatro, con una autonomía de vuelo de 15 minutos y capacidad de cubrir distancias urbanas de 15 kilómetros. Básicamente, se trata de una cabina aerodinámica, con un total de cuatro drones colocados en la parte superior e inferior, que al moverse de forma coordinada trasladan en el interior una sensación de confort similar a la de un automóvil.

A expensas de cómo evolucione la legislación vigente, la altura de vuelo de este drone de drones autónomo e interactivo se encontraría entre los 100 y los 300 metros y su velocidad de trayecto sería de 90km/h, aunque la arquitectura podría permitir velocidades de hasta 190km/h. Totalmente integrable en ciudad, complementario al resto de medios de transporte, se podría aparcar en una plaza de parking de coche. El pasajero siempre mira al cielo, no ve las hélices y, con ello, su sensación de tranquilidad y de libertad es enorme en esa carretera virtual.