La plataforma madrileña tiene previsto acompañar a los encausados y familiares en los días del proceso, un acto público para el día 30 de este mes al que acudirán «personalidades del mundo de la cultura, la política, el sindicalismo, la ecología y de movimientos sociales», y diversas actividades de difusión.

En rueda de prensa, los portavoces Nati Pulido, Pepe Mejía y Pedro Casas han remarcado que las actividades de asistencia a presos son «plenamente legales, al menos en un Estado Derecho».

«Tachar sus actividades de terrorismo, solicitando penas que van de los 8 a los 20 años de cárcel, es un despropósito», han remarcado. Asimismo, han recordado que ETA anunció el cese definitivo de su actividad armada en 2011, mientras que el presente proceso judicial se inició en 2013.

En este sentido, han señalado que con la disolución de ETA «se ha generado la esperanza de cerrar definitivamente el conflicto en la sociedad vasca». Frente a ello, han criticado que el Estado «sigue empeñado en dar respuesta en la dirección contraria a la distensión y la convivencia», citando ejemplos como la negativa a acercar los presos a Euskal Herria, el caso de los jóvenes de Altsasu o la estrategia perversa del «todo es ETA».

Así, han aseverado que el encarcelamiento de los encausados «no haría sino extender un sufrimiento injusto e innecesario a sus seres queridos», teniendo en cuenta que «hay 38 hijas e hijos menores a cargo de estas personas y que pasarían a convertirse en los conocidos niños de la mochila».

«Pensamos que es el momento de decir alto y claro que queremos convivir en paz», han remarcado. Por ello, han animado «al conjunto de la sociedad a defender los derechos de todas las personas, independientemente de la simpatía ideológica que nos produzcan».

«Algunos añoran épocas pasadas y quieren sacar réditos electorales pero en Euskal Herria no sacan nada, como se ha comprobado. Madrid es el Madrid de la resistencia, el Madrid del ‘No pasarán’», han concluido.