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La Asamblea Nacional francesa abre la puerta a la reproducción asistida a todas las mujeres

La Asamblea Nacional francesa ha votado el primer punto de la nueva Ley de Bioética, que contempla la extensión del acceso a las técnicas de reproducción asistida o PMA a todas las mujeres, también a las solteras o a las que tienen como pareja a otra mujer.

Imagen de un laboratorio dedicado a técnicas de reproducción asistida. (Philippe LOPEZ / AFP)
Imagen de un laboratorio dedicado a técnicas de reproducción asistida. (Philippe LOPEZ / AFP)

Una gran ovación ha puesto fin al debate y aprobación del primer capítulo de la Ley de Bioética que se debate actualmente en el legislativo francés.

Pese a la oposición de la derecha, ha obtenido un amplio respaldo el artículo que actualiza el acceso a las técnicas de reproducción asistida o PMA, hasta ahora limitado a problemas de fertilidad en parejas heterosexuales, para extenderlo a todas las mujeres, incluidas las que forman pareja con otra mujer o las que no tienen pareja.

El artículo –parte de un amplio proyecto legislativo, que está previsto complete su primera fase de aprobación en la Asamblea Nacional el 9 de octubre, antes de seguir una tramitación no exenta de complejidades en el Senado dada la mayoría de derecha- ha sido validado por 55 votos a favor frente a 17 en contra y 3 abstenciones. Los electos de varios grupos políticos han emitidos votos diferentes.

La ministra de Salud, Agnès Buzyn, ha expresado su deseo de que el proyecto de ley –tras la tercera y definitiva votación en Asamblea Nacional– se adopte antes del verano de 2020, a fin de que la Seguridad Social garantice el acceso a la PMA a todas las mujeres que opten por estas técnicas «nada más ser promulgado el nuevo texto».

La extensión de la PMA a parejas lesbianas o a mujeres solas ha sido objeto de una larga campaña en contra a cargo de grupos defensores de la «familia tradicional». Su mensaje ha sido expuesto en el hemiciclo por parte de algunos portavoces de la derecha que han llegado a hablar de «desaparición de la figura del padre».

Por contra, las asociaciones LGBT+ han abogado por garantizar la igualdad de derechos a todas las mujeres y a no hacer distinciones entre parejas homosexuales y heterosexuales.