«Hoy es un día horrible para Nueva Gales del Sur en lo que se refiere a los incendios. Tras la trágica muerte anoche de un bombero voluntario, se ha confirmado que hay dos muertos en Cobargo, la Policía lo ha confirmado, y una tercera está desaparecida», ha manifestado en una rueda de prensa la jefa del gobierno de ese estado, Gladys Berijiklian.

Previamente, el jefe del Gobierno de Victoria, Daniel Andrews, ha indicado que se teme por la situación de cuatro personas que no han sido localizadas en las zonas donde arden varios focos en este estado del sureste del país, que también han provocado «pérdidas muy significativas de propiedades, ganado, vallas y cobertizos».

Los daños se han producido principalmente por los fuegos en el municipio de East Gippsland, situado en el extremo sureste de Victoria y fronterizo con el estado de Nueva Gales del Sur, y al que pertenece el balneario de Mallacoota, donde unas 4.000 personas han tenido que refugiarse en el muelle y la playa.

Andrews ha dicho que se sopesa la posibilidad de evacuar por mar a algunas comunidades afectadas por los incendios, como la de Mallacoota, que aparece con un cielo rojo encendido y un humo denso en las imágenes divulgadas por las redes sociales.

El jefe de los bomberos de Victoria, Steve Warrington, ha informado de que un cambio en la dirección del viento ha mejorado la situación en Mallacoota, así como a la comunidad de Corryong, aunque el peligro de los fuegos aún no ha pasado.

La situación en Victoria se ha agravado en los últimos días, con 260 nuevos focos declarados el lunes y 61 más durante la madrugada del martes.

En el estado de Nueva Gales del Sur, el más afectado por esta crisis, se ha informado también de la destrucción de decenas de propiedades.

Con la muerte de las dos personas en Cobargo se eleva a 11 el número de muertos en Nueva Gales del Sur y a 12 en el conjunto del país desde julio.

También han obligado a cancelar los espectáculos pirotécnicos de Fin de Año previstos en diversas localidades, salvo en Sídney, la mayor ciudad del país, donde la autoridad municipal ha logrado un permiso especial de los bomberos.

Los incendios comenzaron antes del inicio del verano austral, que empieza en diciembre y en el que se espera una escasez de lluvia hasta el 21 de marzo.