«Nuestra mayor preocupación siempre será la atención de las personas con las que trabajamos y, por tanto, ante el riesgo límite de la población con la que trabajamos, vamos a aplazar la huelga. Así podremos dedicarnos al 100% a responder ante esta situación tan grave», destaca ELA en la nota con la que han comunicado que deciden aplazar la huelga de las residencias de Gipuzkoa por la situación de crisis creada por la pandemia del Covid-19.

El sindicato y las trabajadoras han tomado esta decisión «hasta que se normalice la situación» del coronavirus. Destacan que es «una decisión difícil» pero a la vez la más «coherente».

Las empleadas de las residencias han cumplido hasta la fecha 243 jornadas de huelga desde hace dos años. El convenio del sector sigue sin renovarse y la negociación colectiva está bloqueada. La última convocatoria de huelga tenía vigencia hasta el 8 de abril; han cumplido dos meses y seis días de huelga desde el 7 de enero. La semana pasada algunas trabajadoras se encerraron en la Casa de las Mujeres de Donostia para pedir «amparo ante el maltrato institucional que padecemos».

Afirman que esta decisión es acorde con su «comportamiento de responsabilidad intachable» desde el inicio de la huelga, que llevan a cabo para reclamar la «mejora» de las condiciones laborales y el «aumento» de las plantillas «para dar una mayor calidad en el servicio».

Situación alarmante por los recortes

Denuncian que, a día de hoy, «no hay un control por parte de la Diputación Foral de la aplicación de las medidas frente al coronavirus».

«Es lo que sucede cuando dejas un sector tan sensible en manos de empresas privadas que buscan sus beneficios económicos. Que cada una actúa según sus intereses y no a favor de los intereses de los usuarios, las trabajadoras y la sociedad», recalcan.

Dicen que la Diputación y el Gobierno de Lakua «llevan años siendo unos irresponsables en este tema y es un escándalo que no pongan más personal en las residencias».

«El alarmismo propio de este sector es que la situación lleva siendo alarmante todo este tiempo», añaden las trabajadoras pertenecientes a ELA, que exigen a esas dos instituciones «más personal en las residencias» y «que solucionen el conflicto y den más herramientas y mejores condiciones» laborales.

«Con coronavirus o sin él queremos dar un servicio de calidad a nuestros mayores», enfatizan.