Antes de haber registrado un solo muerto por el nuevo coronavirus, Dinamarca, con cerca de 5,8 millones de habitantes, clausuró instituciones públicas y educativas, prohibió las concentraciones de más de diez personas y cerró fronteras a extranjeros sin permiso de residencia a mediados de marzo.

Las medidas, dictadas inicialmente para dos semanas, han sido prolongadas hasta el 13 de abril por el Gobierno, que ha dejado la puerta abierta a una posible relajación de algunas medidas preventivas.

«Si las próximas dos semanas los daneses seguimos juntos manteniendo las distancias, y si las cifras siguen siendo estables y razonables, el Gobierno empezará una apertura gradual, tranquila y controlada de nuestra sociedad después de Semana Santa», ha señalado la primera ministra, Mette Frederiksen, en rueda de prensa.

Entre las medidas urgentes que el Ejecutivo aprobó el 13 de marzo se halla la autorización de efectuar aislamientos o ingresos hospitalarios forzosos de personas contagiadas por el Covid-19. El Ministerio de Sanidad puede obligar a personas contagiadas o que se cree puedan estarlo a ser examinadas por un médico; en caso de no hacerlo, la Policía puede usar la fuerza «necesaria» para asegurar el cumplimiento de esas medidas o facilitar un ingreso hospitalario.

La curva se achata

Las últimas cifras oficiales difundidas este lunes registran 533 ingresados por Covid-19, de los que 137 están en cuidados intensivos, y 77 fallecidos, cinco más que ayer, unos números que, según la primera ministra, reflejan que «la curva se está achatando», aunque la situación sigue siendo «grave».

Frederiksen ha resaltado que las iniciativas introducidas han tenido efecto y que la curva se mantiene en zona verde, aunque ha avisado de que, si la gente no respeta durante estas dos semanas las medidas de distanciamiento, la situación empeoraría y podrían adoptarse otras más estrictas.

«En otros países vemos a soldados llevando cadáveres en camiones, pabellones convertidos en morgues. Hay personas que mueren en sus camas y no las encuentran hasta pasado un tiempo. Todo eso ocurre en Europa, pero Dinamarca no va hacia ahí», ha afirmado.