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La gran Asamblea China promete mano dura contra quienes protestan en Hong Kong

La sesión anual del Parlamento chino debatirá una controvertida ley de seguridad nacional para Hong Kong que prohibiría cualquier actividad vinculada a la sedición, la secesión o el «terrorismo», en un claro mensaje del control de Pekín sobre el territorio tras las mayores protestas en más de dos décadas.

Un grupo de agentes de seguridad vigilando la celebración de la asamblea china anual. (Leo REMIREZ/AFP)
Un grupo de agentes de seguridad vigilando la celebración de la asamblea china anual. (Leo REMIREZ/AFP)

La ley, que vetaría también la injerencia extranjera en Hong Kong, forma parte de la agenda del principal órgano legislativo del régimen chino, como ha confirmado este jueves un portavoz de esta sesión parlamentaria, Zhang Yesui, según la radiotelevisión pública británica BBC.

«La seguridad nacional es la piedra angular sobre la que se fundamente la estabilidad del país y va en interés de todos los chinos, también de los compatriotas hongkoneses», ha explicado. De esta forma, el órgano parlamentario aspira a dar un paso más en la actual premisa de «Un país, dos sistemas».

El Gobierno chino ha optado por dar el paso en vista del bloqueo político que persiste en Hong Kong, que en setiembre celebrará elecciones parlamentarias. La oposición política aspira a aprovechar entonces el descontento social del último año para forjar un bastión frente a Pekín.

La nueva ley no requerirá del visto bueno de las autoridades hongkonesas por estar incluida como anexo en la Ley Básica, sobre la que pivota todo el marco legislativo de Hong Kong, ha explicado una fuente consultada por el ‘South China Morning Post’.

«Si la ley de seguridad no se adopta durante la sesión anual del Congreso Nacional del Pueblo o poco después, ¿hay alguna garantía de que el Parlamento de Hong Kong lo vaya a hacer en los próximos dos años?», ha planteado.

Otro escenario más en la guerra por la hegemonía mundial

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya ha adelantado que su Administración actuará con «fuerza» si China decide seguir adelante e imponer una ley de seguridad nacional sobre Hong Kong tras las protestas registradas a lo largo del año pasado.

En una serie de declaraciones realizadas por el mandatario del país norteamericano a su salida de la Casa Blanca, ha recalcado que «nadie conoce aún los planes de China», pero ha insistido en que Washington «abordará el asunto debidamente».

Hong Kong vivió en 2019 sus mayores protestas sociales desde que Reino Unido cedió a China la soberanía de su antigua colonia en 1997. Lo que comenzó como una movilización contra la ley de extradición, derivó en reivindicaciones más amplias en favor de un aperturismo democrático en este territorio.

Para el Gobierno chino, la medida es «absolutamente necesaria» para garantizar que el Congreso Nacional del Pueblo cumple con su «obligación» frente a la «violencia» registrada y el aumento de la tendencia «secesionista» en la región, tal y como ha indicado el diario estatal ‘China Daily’.

En un editorial, el periódico ha indicado que aquellos que encuentren esta noticia «reconfortante y alentadora» son los que «buscan la estabilidad y prosperidad de Hong Kong».

«Lo que ha pasado en Hong Kong desde junio del año pasado muestra que el sistema legal de la región es débil en cuanto a seguridad nacional se refiere», recoge el texto.