Txisko Fernández
Donostia

Johnson anuncia un plan de reactivación con unos fondos que la oposición considera escasos

El primer ministro británico no atraviesa su mejor momento de popularidad, aunque tampoco ha perdido la confianza de la mayor parte de quienes le colocaron en Downing Street. Boris Johnson, que minimizó el impacto del coronavirus hasta que la enfermedad le dejó postrado en una cama de hospital, tiene ahora el reto de sacar a Gran Bretaña de la profunda crisis, sanitaria y económica, a la que le ha llevado el peligroso cóctel que combina populismo y pandemia.

El primer ministro británico, Boris Johson, este martes en la visita a unas obras del Instituto de Tecnología de Dudley. (Jeremy SELWYN/AFP)
El primer ministro británico, Boris Johson, este martes en la visita a unas obras del Instituto de Tecnología de Dudley. (Jeremy SELWYN/AFP)