MIKEL INSAUSTI
DONOSTIA

La fisicidad de una obra visionaria que representa el miedo a lo desconocido

COLOR OUT OF SPACE
EEUU. 2019. 111’
Dir.: Richard Stanley. Guion: Richard Stanley y Scarlett Amaris, sobre la novela de H.P. Lovecraft. Prod.: Elijah Wood. Int.: Nicolas Cage, Joely Richardson, Tommy Chong, Josh C. Waller, Madeleine Arthur. Fot.: Steve Annis. Mús.: Colin Stetson. Mont.: Brett W. Bachman.

Joely Richardson y Nicolas Cage como el matrimonio propietario de la granja donde cae el meteorito (NAIZ).
Joely Richardson y Nicolas Cage como el matrimonio propietario de la granja donde cae el meteorito (NAIZ).

En los tiempos extraños que nos está tocando vivir, en los que nos enfentamos a un enemigo de origen desconocido, cobra más sentido que nunca la novela visionaria de Howard Phillips Lovecraft ‘El color que cayó del cielo’. Y si hay un cineasta que entiende como nadie al escritor de Providence es Richard Stanley, quien un siglo después de la publicación del libro ha cumplido por fin su sueño de adaptar a su autor preferido, a quien conoce desde niño a través de las lecturas maternas.

Pero nada de esto hubiera sido posible si Elijah Wood no sale al rescate del cosmopolita y defrenestado cineasta con su compañía SpectreVision, que ha producido películas del género fantástico de reciente influencia, entre las que se encuentran ‘Open Windows’ (2014), de Nacho Vigalondo, ‘Mandy’ (2018), de Panos Cosmatos, o ‘Daniel es real’, de Adam Egypt Mortimer. Una lista de títulos nada convencionales en la cual encaja perfectamente ‘Color Out of Space’ (2019).

De este proyecto se viene hablando desde el año 2013, cuando un Stanley refugiado en Occitania hizo el documental ‘L’autre monde’ (2013), sobre el enclave de Montségor como centro mundial del esoterismo. Antes había hecho otro documenta titulado ‘The Secret Glory’ (2001), que investigaba al nazi Otto Rahn su búsqueda del Santo Grial, que sirvió a Spielberg de inspiración para Indiana Jones. De la ficción, en cambio, tuvo que despedirse a la fuerza con el frustrado guion de ‘La isla del Doctor Moreau’ (1996).

De ahí la vital importancia que cobra su vuelta, teniendo en cuenta que esta creación es a su vez una recuperación del auténtico terror cósmico en la tradición de títulos como ‘La cosa’ (1982). Un género al que el autor de ‘Hardware’ (1990) aporta su particular toque lisérgico, con personajes enloquecidos como los que asumen Nicolas Gage y el actor cómico Tommy Chong.