Todo apunta a que el técnico rojillo, Jagoba Arrasate, volverá a contar con las piezas justas para conformar el ataque que intentará buscarle las cosquillas al Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez. Tal y como se ha podido comprobar en el entrenamiento matinal, Enric Gallego parece lejos de que pueda ser de la partida, tras ejercitarse de manera individual, al igual que lo ha hecho Asier Córdoba.

El espigado delantero catalán no termina de recuperarse del golpe que le obligó a retirarse de manera prematura en la Euskal Herria Txapela y habrá que esperar a ver su evolución física a lo largo de la semana, pero ahora mismo es seria duda para medirse a los azulones.

La otra cara de la moneda ha sido Unai García, que comienza a superar su lesión muscular en el cuádriceps derecho, al trabajar parte de la sesión junto al resto de sus compañeros. Una buena noticia para el central de Eskirotz, quien no acaba de encadenar esa regularidad que le gustaría por las diferentes dolencias que viene padeciendo en los últimos tiempos.

Como es habitual, el entreno dirigido por Jagoba Arrasate ha estado marcado por la intensidad, con ejercicios de técnica, posesión y partidillos. En una de esas prácticas, ha sido Lucas Torró quien ha dado el susto, al empotrarse contra una de las vallas con bastante contundencia, pero sin que ello haya derivado en consecuencia alguna.

La sesión ha servido para comprobar que toda la plantilla está muy enchufada y con bastante más acierto de cara a portería de lo que suele ser habitual en Tajonar, especialmente Nacho Vidal y Adrián, quienes han firmado algunas dianas de bella factura.

De nuevo, Osasuna volverá a entrenar mañana –Tajonar, 10.00– solo con presencia de medios de comunicación, a la espera de conocer cuál será el día y horario de su enfrentamiento contra el Getafe, uno de los partidos que es objeto de la pugna entre Federación y LFP.