Ion SALGADO

Lindano, un pesticida cancerígeno que está presente en ríos vascos

Ekologistak Martxan ha advertido de que en 2018 se superaron los niveles de lindano en seis puntos de la CAV. Basta con señalar que en 2017 el 1,4% de las analíticas realizadas evidenciaba un incumplimiento de la norma, mientras que en 2018 el porcentaje ascendió a «un extremadamente preocupante 11,9%».

En morado, suelos contaminados, en rojo, superaciones de la norma de calidad ambiental de HCH. (EKOLOGISTAK MARTXAN)
En morado, suelos contaminados, en rojo, superaciones de la norma de calidad ambiental de HCH. (EKOLOGISTAK MARTXAN)

En el año 2018 se superaron los niveles de hexaclorociclohexano (HCH) establecidos en la norma de calidad ambiental en seis puntos de la CAV. Así lo indica el informe “Lindano: presente de un legado tóxico”, elaborado por Ekologistak Martxan, que advierte de que estas «superaciones» suelen estar asociadas a suelos contaminados.

El trabajo, en el que se recogen los datos aportados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miterd) y por la Agencia Vasca del Agua (URA), señala que, mientras que en 2017 el 1,4% de las analíticas realizadas en la CAV revelaba un incumplimiento de la norma, en 2018 el porcentaje ascendió a «un extremadamente preocupante 11,9%».

Además, Ekologistak Martxan realizó durante 2019 análisis que han revelado la presencia de este pesticida cancerígeno en muestras de madera recogidas en Enekuri y Jata. «Los resultados muestran la elevada concentración del lindano en las muestras de madera analizada, centenares de veces superiores a la norma de calidad ambiental para este tóxico en las aguas superficiales», apunta.

Y destaca que «estas concentraciones suponen un grave peligro para la salud humana, la flora, la fauna autóctona y los animales de granja. Además de un riesgo de muy elevada preocupación, ya que el lindano al sufrir un calentamiento intenso desprende humos tóxicos como el fosgeno, el cloruro de hidrógenos y el monóxido de carbono».

Erradicar el «legado tóxico»

A juicio de Ekologistak Martxan «debe erradicarse el legado tóxico de los residuos del lindano, para lo cual el Miterd debe implementar medidas de detección de depósitos no controlados y de rehabilitación y descontaminación de residuos, suelos y agua».

Considera que el Miterd debe redactar «normas armonizadas» a cumplir por los órganos gestores de las demarcaciones hidrográficas, fijando el número de analíticas anuales y tomando las medidas oportunas para impedir el incumplimiento de los límites de cuantificación, que debieran ser comunes para todas las demarcaciones hidrográficas.

Asimismo, Ekologistak Martxan incide en que las demarcaciones hidrográficas deben calcular el valor medio anual de este tóxico en cada punto de muestro y analizar su presencia en sedimentos y biota. Y realizar la búsqueda de residuos de lindano en las zonas próximas a aquellos puntos en lo que se detecta este tóxico en el agua.

También aboga por implementar medidas de precaución, tales como el impedir el pastoreo en las zonas contaminadas con estos residuos tóxicos y establecer protocolos de extinción de incendios que prevean la posible formación de fosgeno al arder la madera contaminada.

Por último, reclama que se modifique la legislación relativa al consumo de agua para que se equipare con las normas de calidad ambiental del HCH. En este sentido, recuerda que las actuales normas de agua de consumo humano permiten valores hasta 2,5 veces superiores a los permitidos por la Directiva Marco del Agua para las aguas continentales superficiales.