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Donostia

Una imagen completa del origen y composición de la basura que acaba en los oceános

Una investigación fruto de la colaboración entre instituciones y ONGs de distintas partes del mundo ha permitido identificar los productos con mayor presencia en los ecosistemas acuáticos. El plástico es el predominante y su origen está ligado en gran medida al uso de botellas y envases de comida.

En esta imagen aparecen los puntos de muestreo en el golfo de Bizkaia utilizados para este informe. (marinelitterlab.eu)
En esta imagen aparecen los puntos de muestreo en el golfo de Bizkaia utilizados para este informe. (marinelitterlab.eu)

El pasado martes fue 8 de junio, fecha declarada por la ONU Día Mundial de los Oceános. Por ello, durante esta semana se están publicando numerosos estudios en relación al estado de nuestros mares. Informes que confirman el grave impacto de la actividad humana sobre el medio ambiente marino, pero que se realizan con la perspectiva de que es posible frenar esa tendencia.

Este jueves se han difundido las conclusiones de una investigación, publicada en ‘Nature Sustainability’, que proporciona el primer diagnóstico global del origen y composición de la basura vertida en el océano.

AZTI, centro tecnológico vasco, ha formado parte del equipo compuesto por 15 instituciones de 10 estados que ha analizado los inventarios de basura realizados en mar abierto –tanto en superficie como en el fondo–, aguas costeras, playas y ríos.

Como se observa en el mapa adjunto, en la costa de Euskal Herria se ubican decenas de puntos de muestreo, que son cientos si se amplía el foco a todo el golfo de Bizkaia.

Los puntos de colores corresponden al tipo de muestra recogido: el verde es para las macro (mayores de 2 centímetros) cosechadas en el fondo marino; el rosa fucsia, para micro en aguas superficiales; el amarillo, macro en la costa; y el morado, macro en superficie. 

La misma leyenda sirve para el mapa mundi en el que se han representado todos los puntos analizados para realizar este estudio.

El plástico es el material dominante por mucho

Como media, el 80% de los objetos encontrados son de plástico, por lo que este es, de lejos, el material dominante en la basura marina, seguido de metal, vidrio, ropa y textiles, goma, papel, y madera procesada.

La mayor proporción de plástico se encuentra en las aguas superficiales (95%), seguida de las costas (83%), mientras que los lechos de los ríos muestran la menor proporción (49%).

Los artículos de plástico pueden llegar a medir varios metros de longitud o ser tan pequeños como una millonésima parte de un metro. Esto los hace susceptibles de ser transportados por las olas, por las corrientes del fondo a través de los cañones submarinos o, incluso, por el viento.

Por eso se encuentran desechos plásticos por todas partes, y por eso se muestrean en agua, sedimentos, aire, hielo y organismos. No obstante, estos muestreos solo brindan vistas parciales de un amplio espectro de tamaños de plástico presentes en la naturaleza.

Como se indica en este estudio, nuestro conocimiento sobre la distribución global de desechos plásticos está muy limitado por nuestra capacidad para integrar y comparar conjuntos de datos. Todavía no tenemos una visión completa del problema de la basura marina.

Fragmento de espuma de poliuretano expandido recogido en las aguas superficiales del Océano Pacífico Sur. (Joan Costa)

Los cuatro productos más contaminantes: listos para llevar

Los objetos relacionados con el hogar y la actividad industrial tienen especial relevancia en los fondos y riberas de los ríos, mientras que los ligados al consumo de tabaco (paquetes de cigarrillos, fundas plásticas y encendedores) son especialmente abundantes en las playas.

Aunque este estudio utilizó datos anteriores a la pandemia de covid, artículos de origen médico e higiénico suelen aparecer en los fondos marinos cercanos a la costa, lo que se relaciona con las descargas a través de los inodoros.

Pero lo que resulta más llamativo es que, de las 112 categorías de basura utilizadas en el análisis, tan solo 10 productos plásticos representan las tres cuartas partes de todos los artículos encontrados en el mundo.

Los procedentes de actividades de consumo al aire libre, principalmente de alimentos y bebidas para llevar listos para consumir, dominan ampliamente en la basura global. Las bolsas de un solo uso, las botellas, los envases de comida y los envoltorios son los 4 productos más contaminantes, acumulando casi la mitad de todos los objetos encontrados.

Esta entrada, junto con la persistencia del plástico, explican la exagerada presencia de este material en el océano. Los autores del informe indican que en la Unión Europea ya se han diseñado planes de acción contra el plástico, aunque señalan que las restricciones de mercado de estos planes se limitan a artículos de un solo uso superfluos o fácilmente reemplazables.

Restricciones que no abordan el problema de fondo

«Las restricciones al uso de artículos plásticos como pajitas, bastoncillos para oídos y agitadores de bebidas, aunque son acertadas, aquí demostramos que no abordan aún el problema principal», advierte Andrés Cózar, profesor en la Universidad de Cádiz y coordinador del estudio.

Sobre la base de que evitar la producción de residuos es la forma más eficaz de minimizar la contaminación por basura, los autores abogan por la prohibición de productos plásticos prescindibles en las actividades de consumo al exterior como medida de gestión prioritaria.

Para aquellos productos consumibles al aire libre que se consideren indispensables, el estudio sugiere una aplicación especial de la llamada «responsabilidad ampliada del productor» (RAP), unida a una tasa de depósito reembolsable a la persona consumidora, ambas medidas justificadas por el riesgo extra de escape al medio de este tipo de artículos.

Plantean también las sustituciones de artículos de plástico por alternativas hechas de materiales más fácilmente degradables. «Encontramos que los artículos de papel y cartón, por ejemplo, muestran una presencia muy baja en la naturaleza (1% de media), pero su producción requiere también un abastecimiento sostenible de materia prima», apunta Carmen Morales, investigadora en la Universidad de Cádiz y primera autora del estudio.

«Nuestra idea inicial era sencilla, elaborar un ránking de los productos que más contribuyen a la basura marina como referencia para las políticas preventivas –explica–. Pronto nos dimos cuenta de que no era una tarea tan sencilla; tuvimos la suerte de contar el apoyo de investigadores y ONGs de todo el mundo, pero la información existente está basada en métodos de muestreo y criterios de clasificación muy dispares».

Datos del golfo de Bizkaia

«Existen muchos mantras en torno a las basuras marinas que se tienen que aclarar científicamente», indica Oihane Cabezas, investigadora de AZTI, cuyo equipo ha contribuido a la investigación proporcionando el conocimiento y los datos obtenidos sobre las basuras marinas flotantes en aguas costeras del golfo de Bizkaia gracias a campañas como la realizada para el proyecto europeo LIFE LEMA.

«Esta contribución representa un paso importante en la investigación de las basuras marinas (concretamente sobre la fracción macro > 2cm, que, en comparación con los microplásticos, no está tan estudiada) al proporcionar resultados contrastados por diferentes grupos de investigación sobre la naturaleza y tipología de objetos presentes en diferentes compartimentos ambientales tantos de aguas costeras como de aguas profundas».