GARA
DONOSTIA
COMUNICADO DE EPPK

EPPK critica la misiva de Lakua porque «quiere romper» su unidad

EPPK critica la carta de la Secretaría de Paz y Convivencia de Lakua, en la que le informa de las «opciones legales» para acceder a la libertad, por considerarlo «un renovado intento» por romper su unidad. Ante ello, apela al «apoyo del pueblo», al que llama a participar en las iniciativas de este verano en las que se volverá a reclamar su vuelta a casa.

El Colectivo de Presas y Presos Políticos Vascos lanza dos duros mensajes en el comunicado que ha remitido a GARA: el primero, dirigido al Gobierno francés, al que acusa de haber apostado por que «la situación se pudra y se encone»; y el segundo, para la carta enviada a los presos por la Secretaría de Paz y Convivencia del Gobierno de Lakua, que califica como «un renovado intento para romper EPPK».

Respecto a esta misiva, en la que se informa de los pasos y las opciones legales que la Secretaría que dirige Jonan Fernández contempla para que los prisioneros puedan acceder a la libertad, confirma que ya ha sido recibida por buena parte de sus integrantes encarcelados en las cárceles del Estado español. «Y parece que, 27 años después de haber sido puesta en marcha, quieren recoger ahora lo sembrado por la política de dispersión. Porque nos recuerdan que la legislación de excepción nos ofrece dos opciones: el arrepentimiento colectivo de la izquierda abertzale o el de cada uno de nosotros», censura el Colectivo de Presos. «Parece –continúa– que la función del PNV y de algún otro consiste en recordar a los militantes vascos presos cuál es y cómo es esa vía llena de obstáculos que, año tras año, ha venido a complicarnos aún más el poder español. Como si no lo supiéramos».

«Unidad, solidaridad, unión»

De hecho, EPPK se dirige a la Secretaría de Paz y Convivencia para enviarle dos mensajes: por un lado, que «somos ya bastante mayores como para decidir entre todos cuál es el paso que debe dar cada uno de nosotros»; y por otro, que los miembros de EPPK se sitúan «dentro de la izquierda abertzale, y nuestra disposición es absoluta para cumplir con la función que nos corresponde en esta nueva fase del proyecto de liberación independentista».

En ese sentido, el Colectivo se congratula porque, a su juicio, «el proceso de liberación no se detendrá y no esperará hasta la salida de prisión del último preso. Y afortunadamente, cada vez que uno de nosotros salga de la cárcel contarán con una excusa menos para lastrar el proceso de liberación y nosotros, con un activo más para fortalecerlo».

Recuerda que ha decidido hacer uso de los mecanismos legales existentes para posibilitar su liberación y vuelta a casa, «pero no a solas: queremos recorrer ese camino con el apoyo del pueblo. Y como hasta ahora, todos juntos, a pesar de tener que desarrollar la trayectoria jurídica de cada cual». En ese punto recalca que su máxima se resume en «unidad, solidaridad y unión con el pueblo».

En cuanto al apartado relativo a la actitud del Gobierno de París, las presas y presos vascos afirman que todo lo acontecido en los últimos tiempos en las cárceles francesas –señala que lo de Fresnes solo es un ejemplo–, con las decisiones adoptadas por los jueces de Instrucción y la Administración penitenciaria, muestran que «en lugar de dar pasos en el camino de la resolución del conflicto, han apostado por que la situación se pudra y se encone, igual que hacen en España».

«Nos utilizan como rehenes políticos y detrás de esa estrategia, además de sed de venganza, se esconden también objetivos políticos. Y uno de ellos, muy evidente, es generar inquietud y resignación en el seno de la izquierda abertzale, crear contradicciones artificiales e impulsar la división y la desafección», advierten.

«Hasta la vuelta de todos»

Partiendo de la premisa de que la mayoría social y política vasca aboga por su repatriación y de su convencimiento de que «no habrá verdadera resolución hasta que el último preso esté en casa», EPPK repite el llamamiento que hizo en abril a las instituciones vascas: «Que hagan todo lo que esté en su mano para conseguir nuestra incondicional repatriación. Y nos dirigimos también a los partidos y agentes sociales y sindicales vascos para que redoblen esfuerzos en sus respectivas áreas, porque es justo y urgente».

El último mensaje del comunicado es para la ciudadanía vasca, a la que emplaza a que participe en todas las iniciativas y dinámicas organizadas para este verano en defensa de la vuelta a casa de los represaliados vascos. «Euskal Herria necesita un escenario político sin conflicto y eso no será posible hasta que regresen a casa todos los presos y exiliados políticos vascos. Por eso es tan importante la implicación ciudadana, el impulso popular, de cara a la construcción de ese escenario beneficioso para todos».