GARA
bratislava

La dimisión del ministro de Interior eslovaco no aleja la crisis

El ministro del Interior de Eslovaquia y viceprimer ministro, Robert Kalinak, dimitió ayer como consecuencia de la muerte del periodista de investigación Jan Kuciak, tiroteado en su casa junto a su novia a finales de febrero.

El responsable de Interior explicó que abandona el Ejecutivo tripartito de coalición, liderado por el primer ministro socialdemócrata, Robert Fico, para mantener la estabilidad del Gobierno.

El partido Most Hid, de la minoría húngara, uno de los socios de la coalición, había exigido la salida de Kalinak como condición para seguir en el Gobierno.

Kalinak reconoció que la presión desde la calle y de los socios de coalición motivaron al político socialdemócrata a dimitir tras diez años en el cargo.

El país centroeuropeo vivió varias manifestaciones multitudinarias tras la muerte del periodista y una de las exigencias era la salida del ministro.

Apoyos sin confirmar

Antes de su muerte, Kuciak, que investigaba actividades de la mafia italiana en Eslovaquia y sus supuestos contactos con dos cercanos colaboradores de Fico, alertó a la policía que había recibido amenazas, que supuestamente no fueron tenidas en cuenta por los órganos de seguridad, bajo responsabilidad del Kalinak.

Sin embargo, su cese puede no ser suficiente para solventar la crisis. El líder de Most Hid, Bela Bugar, no confirmó si el gesto va a ser suficiente como para que el partido se mantenga en la coalición. Y el líder de l Partido Nacional Eslovaco (SNS), parte de la coalición gubernamental, Andrej Danko, afirmó que pedirá la celebración de elecciones anticipadas si el Gobierno pierde el apoyo de Most Hid.