El ministro del Interior paquistaní, Ahsan Iqbal, de 59 años, resultó herido de bala en un brazo en un supuesto atentado. En el cargo desde hace apenas nueve meses, Iqbal acababa de finalizar un discurso frente a un grupo de cristianos cerca de su pueblo natal, en el distrito de Narowal, cuando un joven de entre 20 y 22 años le disparó en el hombro derecho.

«Está fuera de peligro y fue trasladado a un centro médico en Lahore (...) El atacante ha sido arrestado», indicó a la agencia AFP su asistente especial, Asim Khan.

«Un atacante disparó a Iqbal durante una pequeña reunión pública cerca de su pueblo natal en el área de Kajruru del distrito de Narowal», indicó, por su parte, el jefe de la comisaría a cargo de la zona, Shahbaz Ahmed.

El encuentro con los lugareños no estaba planeado, pero es común que el también ministro de Planificación y Desarrollo convoque por sorpresa actos a su llegada a Kajruru. «No había ninguna alerta por amenaza en su contra, era un día normal», apuntó Ahmed, al explicar que se había desplegado a la Policía sin previo aviso por tratarse de un evento espontáneo.

«Cuando acabó su discurso, la gente comenzó a arremolinarse a su alrededor para [trasladarle] sus problemas personales. Estaba firmando un papel a una persona cuando Abid Hussain se acercó y le disparó», relató.

El atentado ocurre cuando el partido en el poder, la Liga musulmana paquistaní (PMLN), enfrenta problemas. La Corte suprema destituyó en julio pasado por corrupción al ex primer ministro Nawaz Sharif, impedido para dirigir el PMLN, que creó, y luego le prohibió participar de por vida en cualquier elección.