Agricultores franceses pusieron ayer en marcha un bloqueo de refinerías de petróleo y depósitos de combustible en protesta por la decisión del Ejecutivo de permitir a la compañía Total usar aceite de palma importado en una biorrefinería.

Con tractores, fardos de paja y mucha determinación: así protestaban ante trece refinerías y depósitos de carburante de todo el Hexágono contra las «incoherencias del Gobierno» y las importaciones de productos agrícolas que, según afirman, no respetan los criterios europeos.

«Tenemos desplegadas entre 70 y 160 personas en 13 instalaciones y otra será bloqueada a partir de las 9.30», precisó a AFP Christiane Lambert, presidente de FNSEA, el primer sindicato agrícola francés, que ha organizado esta movilización de tres días, que podría extenderse, junto a Jóvenes Agricultores (JA).

«Francia importa cierto número de productos que no respetan las reglas que se nos imponen a los agricultores franceses. Esto afecta tanto a la carne de Mercosur y al vino español como al aceite de palma», indicó Damien Greffon, responsable sindical en la región parisina.

Cerca de París, los agricultores volcaban, bajo la atenta mirada de la Policía, grandes cantidades de estiércol, tierra y patatas para bloquear el acceso al depósito de combustible de Grigny.

El proyecto de Total ha sido «la gota de aceite de palma que ha hecho rebosar el vaso», como resumió Pierre Lebaillif, presidente de JA en Normandía.

Hasta 300.000 toneladas por año de aceite de palma, producto muy controvertido puesto que se le acusa de favorecer la deforestación del Sudeste asiático, serán importados para alimentar la refinería de La Mède, en las Bocas del Ródano. La agricultura francesa, por su parte, puede suministrar para el mismo fin aceite de girasol o de colza, pero a un precio más alto.

El acceso a estas instalaciones estaba bloqueado desde la noche del domingo por varias decenas de campesinos. Ayer, el ministro de Agricultura, Stéphane Travert, aseguró que el Gobierno no va a dar marcha atrás en su decisión de autorizar a Total a emplear aceite de palma importado. «Este bloqueo no puede ser la solución a la discusión que vamos a tener. Este bloqueo es ilegal», añadió.

Al necesitar quemar más de 650.000 toneladas de materias primas por año, la refinería de La Mède utilizará también otros tipos de aceite, entre ellas 50.000 toneladas de «colza francesa», según prometió a principios de mes el presidente de Total, Patrick Pouyanné.

Los agricultores consideran que eso es inaceptable. «Con La Mède vamos a perder 400.000 hectáreas de colza sobre 1,5 millones de hectáreas totales».