Ariane KAMIO
DONOSTIA
Entrevista
ALAITZ LECEAGA
ESCRITORA

«A la hora de escribir no tienes más remedio que sentarte en la bicicleta y ser tú quien da a los pedales»

Comenzó leyendo los libros que su madre guardaba en una librería en casa. «Cumbres borrascosas», «Rebeca», «La casa de los espíritus»... son algunas de las novelas que han marcado su trayectoria literaria. Arrancó escribiendo relatos cortos en plataformas de internet y ahora da el salto al papel con «El bosque sabe tu nombre», publicada por Ediciones B.

Comenzó a publicar en internet, y con gran éxito. Hábleme de su experiencia.

Como la mayoría de gente que empieza en este mundo, yo también comencé escribiendo cosas más cortas, cuentos, relatos… Hace algunos años ya surgió la idea de “El bosque sabe tu nombre” y muy pronto, cuando me puse a plantear la historia, me di cuenta de que iba a necesitar una novela más larga, que la extensión de un relato no me iba a permitir contar todo lo que quería contar. Pero sí, ese fue el principio.

El estilo de los cuentos que escribía en internet y el libro que se publica ahora, ¿tienen algo que ver?

La verdad es que no tienen mucho que ver, aunque al final sí que tenía bastante público esperando más relatos, porque los escribía por partes. Pero no tenían nada que ver con “El bosque sabe tu nombre”. Eran de estilos totalmente diferentes.

¿Qué le empujó a comenzar a escribir?

Desde que recuerdo siempre he sido escritora en mayor o menor medida. Desde pequeñita siempre me ha gustado leer, porque creo que antes de escritora soy lectora y creo que casi todo el mundo también lo es. Siempre me recuerdo leyendo, yendo a la librería que mi madre tenía en casa a buscar libros. De alguna forma siempre había formado parte de mí, hasta que un día me di cuenta de que las historias de los demás no eran suficientes y necesitaba contar mis propias historias.

Está obteniendo un éxito considerable con «El bosque sabe tu nombre». ¿Se esperaba tener una acogida así?

La novela va muy bien, está gustando mucho, la acogida en España ha sido increíble y fuera de España también. La parte de escribir es un proceso bastante solitario. Al final estás tú con tu teclado y tus ideas durante unos meses y en esa parte nunca te imaginas una acogida así, ni estar viviendo un momento como este. Es una cosa única. Es el sueño que tiene todo el mundo cuando se pone a escribir.

Una escritora autodidacta…

Sí, totalmente. Y creo que es una cosa de casi todos los escritores. Puedes acudir a cursos y demás formaciones, pero al final hay una parte importante que no puedes aprender viendo a otras personas, sino que no tienes más remedio que sentarte en la bicicleta y ser tú quien da a los pedales. Así fue como empecé, leyendo lo que hacían otros escritores, cuál era su técnica y después de meses investigando y leyendo, llegué a la conclusión de que cada uno más o menos tenía su sistema.

Dice que la acogida en Euskal Herria y en el Estado ha sido buena; creo que también hay visos de traducirlo.

Fuimos a la feria de Frankfurt, que es una de las ferias más importantes del mundo, y allí había editores extranjeros que habían oído hablar de la novela después de todo el movimiento que había habido aquí. El primer día de feria, la primera mañana, me llamó mi agente avisándome de que habíamos cerrado acuerdos en diferentes países. La verdad es que seguimos cerrando traducciones para otros idiomas.

Son dos niñas las protagonistas, dos hermanas. ¿Es una novela matriarcal?

Las mujeres son las protagonistas, también hay personajes masculinos, pero la mayoría son femeninos. Y además quería contarlo de esa forma. Leyendo, viendo ficción –soy una gran consumidora de ficción–, a menudo me parecía que los personajes femeninos en algunas novelas eran secundarios, invisibles… Directamente eran de adorno. Tenía muy claro en el momento que decidí escribir que quería enmendar un poco todo eso.

Basondo es el pueblo ficticio donde se desarrolla la trama, el mar Cantábrico está ahí… ¿Ha tenido algún lugar específico como fuente de inspiración para sus localizaciones?

No en concreto. Basondo sí que está aquí en la cornisa cantábrica, está muy claro. Además hay diferentes pistas. Mucha gente tiene curiosidad. Era muy importante para mí que fuera un sitio imaginario, porque me permitía darle un toque extra de magia al pueblo, al lugar, que es más creíble cuando el lugar no existe.

¿Puede adelantarnos algo sobre lo que se va a encontrar el lector en esta novela?

Sobre todo te diría que es la historia de una de las hermanas, la hermana superviviente, y sobre todo te diría que es la historia de ella, superando diferentes obstáculos, a veces con un poco de ayuda de ese poder especial que ella tiene, y otras veces únicamente empujada por su ingenio, por su necesidad de sobrevivir. Y sobre todo te diría que es la historia de la protagonista superando obstáculos, obstáculos en algunos momentos imposibles.