GARA publica hoy la segunda parte de la entrevista a Jokin Aperribay tras exponer ayer su opinión de la renovación de Oyarzabal, del ascenso de Gorosabel, Sangalli y Merquelanz al primer equipo, de las incorporaciones de Theo y Merino y del intento de fichar a un jugador ofensivo antes del 31 de agosto.

¿Por qué ha decidido cambiar la estructura técnica este año?

Estamos en un momento en el fútbol con una situación económica que permite a muchos clubes gestionar el dinero que entra de la televisión y de otros contratos en jugadores veteranos que les permiten estar en Primera y van a estar para tiempo. Y hay clubes que históricamente estaban en Primera con otras circunstancias, que se basaban más en la cantera, y ahora están en Segunda y Segunda B. Eso nos hace reflexionar y pensar que tenemos que buscar mejorar la metodología, incrementar los procesos de trabajo y la exigencia, sobre todo en el último tramo de la formación. Pensar que si un jugador sube del segundo al primer equipo sigue formándose. Ahí queríamos mejorar. Pensábamos que después de diez años de Loren al frente de la dirección deportiva era el momento de cambio para poder introducir nuevos parámetros. No cambiamos solo una persona. Del club han salido 17 y han entrado 21 y se ha cambiado la metodología del trabajo del primer equipo para buscar esos objetivos, rejuvenecer ideas, meter exigencia con criterios de metodología para poder seguir compitiendo en Primera con las ideas propias de la Real y con fuerza. Pensábamos que teníamos que dar ese paso.

Han entrado 21 personas y, de los que estaban en Zubieta, solo Ansotegi está en el primer equipo. ¿Eso no puede provocar un trauma dentro del club?

Hemos buscado gente que conocía bien nuestro entorno y el mundo del fútbol desde todos los parámetros en otros lugares, que ha estado en el entorno de la Real como Llopis o Iñigo Almandoz o en el Athletic como Ulloa… Son personas que conocían lo que era la Real, como Asier Garitano, de Bergara. Hemos combinado experiencia en otros campos con profesionalidad, su conocimiento de la Real, del entorno y una aceptación plena de lo que es nuestra base.

Lo que buscamos también y, el Sanse es el mejor ejemplo porque lleva años trabajando bien, es expandir ese trabajo, sus formas de hacer, hacia el primer equipo y a los demás de la cantera. Por eso Aitor Zulaika ha ido a la Real C e Imanol y Labaka siguen en el Sanse, donde ya hicieron tándem antes de que Mikel subiera al primer equipo. Hemos intentado ser cautelosos para que las personas que estaban dentro de Zubieta y las que han venido sepan que el club y las ideas de la Real están por delante de ellos.

¿Se ha buscado a un entrenador como Garitano con un perfil muy diferente al de Eusebio?

Es el entrenador que ha preparado un mes de julio con una clara dinámica de entrenamientos con un gran contenido de exigencia en alimentación y en el aspecto físico. Se han metido muchas horas de exigencia en las dinámicas habituales de vida. Ahora buscamos la forma de jugar y estoy seguro de que Asier quiere una que se adapte a los jugadores del primer equipo y a los que vienen por detrás.

Han trascendido ciertas quejas de los jugadores, el propio Garitano admitía que cuesta asumir un cambio... ¿No se ha pasado de un extremo al otro en el trabajo físico o el control del peso y de la alimentación?

Sabíamos lo que debíamos hacer, pensábamos que para ser competitivos y para que la cantera de Zubieta siga siendo competitiva en la Liga y en el fútbol europeo los parámetros de exigencia los debíamos incrementar y los jugadores lo pedían también. Estamos seguros de que será bueno a medio y largo plazo y esperemos que también en el corto. Es un cambio que se une al de jugadores importantes que han sido base en la forma de jugar como Xabi Prieto y Carlos Vela. Porque que no solo tenemos un cambio de forma de jugar, también de jugadores...

En cuatro años solo quedan cuatro jugadores de la plantilla que jugó en la Champions...

Ha tocado la renovación ahora. Teníamos una generación con jugadores como Ansotegi y Mikel González, que eran veteranos, y esos jugadores, sobre todo de primeros de los 80, han tenido que dejar el lugar a otros. En los dos o tres últimos años ha habido un cambio de jugadores de los 80 por los de los 90.

Hay doce jugadores que no han pasado por la cantera en el primer equipo. ¿Tiene el Consejo la intención de que el mayor número de jugadores hayan sido formados en la cantera?

Sin duda. Es algo que nos preocupa y nos ocupa. Todos los técnicos en la Real lo tienen muy claro y el Consejo también. El porcentaje de jugadores de casa tiene que ser el más alto posible buscando la competitividad del primer equipo en una liga muy difícil y debemos trabajar en esa línea para conseguirlo cuanto antes. Estamos en años importantes para consolidar a la Real estructuralmente, para seguir siendo lo que éramos y para fortalecerla. Queremos potenciar la cantera y reforzar la presencia de jugadores de la casa en el primer equipo con las nuevas formas de trabajar, con el nuevo Anoeta y con las inversiones en Zubieta. Se notará en la presencia de jugadores de la cantera en el primer equipo y en eso debemos trabajar profundamente.

¿En ese objetivo cómo se entiende la venta de Odriozola?

Cuando se producen este tipo de situaciones u ocasiones en las que un jugador te dice que le gustaría aprovechar una oportunidad, lo que haces es escuchar al jugador y al otro club. Yo estaría encantado si él siguiera y él estaba encantado en la Real. A ver si el futuro puede hacer que vuelva y juegue unos años más aquí. La situación era la que era y además hay muchos jugadores en ese puesto, no solo en el primer equipo, como Zaldua y Gorosabel y la posibilidad de que Aritz juegue ahí. También en el Sanse, en el C y el juvenil tenemos buenas opciones ahí.

Han decidido superar los parámetros que seguían en fichas y en traspasos con los fichajes...

Queremos que en el club haya jugadores que puedan aportar, que en la combinación del máximo número de futbolistas de casa y los que se incorporan la Real pueda ser más competitiva. Ahí hay que ser valiente a la hora de dar oportunidades a los jugadores de casa y ser valiente para que las incorporaciones aporten. En el futuro tenemos que combinar estas ideas con estar lo más arriba posible en la clasificación. En la planificación hay veces que se puede mirar al futuro y buscar elementos que aporten al club lo que no tienes en el primer y el segundo equipo. En eso estamos cuando incorporamos a los jugadores.

Con el fichaje que buscan serían 25 jugadores sin contar a David Concha y Héctor Hernández, con contrato y sin dorsal...

Se ha hablado con ellos. Tienen circunstancias diferentes. David Concha está en un proceso de recuperación de una lesión. Hector no tiene dorsal y también se está hablando con él para poder encontrar un equipo. Quedan quince días de mercado y hay diferentes alternativas y las estamos mirando.

¿Y Kevin y De la Bella van a quedarse cuando se ha fichado a Theo para el mismo puesto?

Es una circunstancia que igual no pasa al final del mercado, existen alternativas y se está viendo cual es la más apropiada. Igual el día 31 estamos en otra situación con ellos.

Porque Asier Garitano ha dicho que le gusta tener 21 jugadores de campo y tres porteros...

No le damos mucha importancia al número porque hablamos de una plantilla de 24-25 jugadores al final del mercado y no estamos preocupados con ello.

¿Y tras la pretemporada hay preocupación o dudas?

En la pretemporada no ha habido dudas para entrenar y el entrenador nos ha manifestado lo mismo, que los jugadores iban a llegar fatigados para esos partidos, que solo eran un entrenamiento más. Por eso no han generado dudas, sino capacidad de entrenamiento. Son cosas positivas y estamos muy contentos de cómo ha ido la pretemporada. No nos hemos fijado en ningún momento en el resultado. Sería injusto hablar de resultados cuando el entrenador y las personas que han planificado la pretemporada lo habían avisado desde el principio.

¿Comienza la Liga con el objetivo de entrar en Europa?

Tenemos que encontrar la forma de jugar, el nivel de exigencia que nos haga estar satisfechos de nuestro propio trabajo. Si encontramos eso y le damos la importancia al día a día y a cada minuto de trabajo en Zubieta estoy seguro de que el equipo va a encontrar resultados deportivos porque tiene mucha calidad. Debemos dar mucha importancia al proceso de trabajo y a cada momento.

¿Le preocupa el inconveniente de jugar los tres primeros partidos fuera y recibir en el cuarto al Barcelona en Anoeta?

Al final hay que disputar todos los partidos y jugar fuera o en casa tiene la misma importancia y la misma dificultad. Sabíamos que teníamos que jugar los tres primeros partidos fuera, pero es muy importante para la Real la remodelación y estoy seguro de que vamos a afrontarlos con garantías y tendremos buenos resultados en este inicio.

¿Se siente cerca del sueño al ver crecer el nuevo Anoeta a un mes del primer partido en él?

Es un gran esfuerzo para el club desde el punto de vista económico y estructural. Va a ser muy bueno para la Real y para la afición, no podíamos cerrar los ojos y pensar que la Real iba a tener un campo con pistas para toda la vida. &dcFour;Teníamos que ser valientes y afrontar el reto. Gracias al nuevo campo en estos momentos estamos alrededor de los 28.600 abonados, tenemos unas mil entradas de los que llamamos socios corporativos que no vamos a poder atender este año y una 500 personas en lista de espera. Estamos muy cerca o superamos ya la cifra de los 30.000 que nos marcamos como reto y que habríamos cumplido si contamos con todo el aforo, que esta temporada será de 28.600 aproximadamente. No tenemos entradas este año.

Debemos ser conscientes de que la afición va a ir a un campo en obras durante todo el año. Tres cuartas partes del interior del campo van a estar acabadas para el partido del Barcelona, pero vamos a tener que pedir un esfuerzo a la afición para que sea consciente de que esta temporada vamos a estar en obras.

¿Cuanto más puede ingresar la Real por abonados y entradas con el nuevo campo?

Las taquillas y los abonados en Anoeta estaban alrededor de los diez millones de euros con dos medios días del club. Es difícil hacer una previsión ahora porque los precios para las personas menores de 30 años se han abaratado y un abonado de entre 14 y 30 pagará el 50% del abono y los menores de 14 el 30%. Antes desde los 21 pagabas el 100%. Esta temporada podremos verlo mejor con unos criterios objetivos, pero sí van a aumentar de forma considerable los ingresos por abonados y taquillas con el nuevo campo.

Además dará más estabilidad al club y acercará la Real Sociedad a las personas, que pueden participar en el campo no solo del fútbol. Por eso empezamos hace más de tres años un proceso para acercarnos a los aficionados y poco a poco vamos a ir dando más pasos en ese sentido.

¿También en el fútbol femenino la Real da un paso adelante con su segundo equipo?

El fútbol femenino en la Real está absolutamente presente y lo va a estar más en el futuro. Fuimos el primer equipo de la Liga que profesionalizamos a todas las jugadoras, que les hicimos fichas con Seguridad Social y contratos de trabajo. Es verdad que los salarios no tienen nada que ver con el fútbol masculino, pero la importancia del deporte femenino, tanto con el equipo de hockey como con el de fútbol, va a ser cada día mayor y mejor.

El segundo equipo era una necesidad. Cuando se creó el primero se hizo viendo la evolución del fútbol femenino y la realidad estructural que existía en Gipuzkoa alrededor del Añorga y del Oiartzun. Ahora se nos está escapando talento guipuzcoano porque no teníamos ese segundo equipo y entendíamos que la Real debía dar ese paso para mejorar y ayudar a crecer nuestro fútbol femenino.