J.C.C., de 53 años, junto con dos de sus hijos acudieron ayer a Kaseda donde vive una tercera hija y su pareja, ambos muy jóvenes. Familiares de este joven (concretamente el padre y dos hermanos) salieron a enfrentarse a los recién llegados. Eso produjo una discusión fuerte y, según sostienen testigos de los hechos, incluso hubo un enfrentamiento físico. Seguidamente, uno de los familiares de la chica se acercó a un coche, sacó una escopeta y disparó contra los allegados del joven, dejándolos tendidos en la calle, heridos de muerte.

Tras acabar con sus vidas, J.C.C. y sus dos hijos se dieron a la fuga por la carretera secundaria N-132. Fueron interceptados por la Policía Foral a la altura de la localidad de San Martín de Unx, a unos 23 kilómetros del lugar del crimen. Las patrullas de Policía Foral y Guardia Civil se habían movilizado para localizar el Seat Ibiza que les habían descrito los testigos de la huida. Al topárselos en plena carretera, un vehículo de la Policía Foral dio la vuelta e inició una persecución, dándoles alcance rápidamente.

Los agentes pudieron controlar a los ocupantes, que bajaron del vehículo y se colocaron tumbados en el suelo siguiendo las instrucciones que daban los policías a punta de pistola. La patrulla de Policía Foral puso las esposas a dos de ellos. En ese momento, llegó la Guardia Civil, que prestó sus esposas para el tercer detenido.

Despliegue en Kaseda

La alarma en el 112 saltó sobre las 18.53 horas. Además de policías, hasta el lugar se desplazaron ambulancias, equipos médicos de Zangoza y un helicóptero medicalizado. Pero no pudieron hacer nada por los heridos. Los fallecidos tenían 50, 29 y 17 años, respectivamente.

Las versiones sobre el incidente eran confusas, aunque suena con fuerza la idea de que existían problemas muy serios entre la pareja y que, antes del suceso, había habido algún cese temporal de la convivencia.

Lo cierto es que ambos miembros de la pareja salieron ilesos del tiroteo. Juntos tienen una niña pequeña, de unos dos años. Momentos después de la tragedia, se escucharon duras amenazas contra la joven. Además de los tres fallecidos, viven en Kaseda otros dos hermanos de la misma familia..

Los arrestados, de Lizarraldea

A pesar de que al cierre de esta edición todavía proseguían las labores de la Policía científica en torno a los cadáveres y la zona seguía acordonada, desde el servicio de información de Policía Foral se notificó a las 21.54 el envío de varias patrullas de la Brigada de Intervención (los antidisturbios) hacia la localidad. La decisión se tomó como medida preventiva ante la posibilidad de algún altercado.

Los detenidos fueron en un primer momento trasladados a la comisaría de Tafalla, pero luego los llevaron directamente a Iruñea. Se prevé que hoy pasen a disposición judicial.

Aunque todos los implicados son navarros, la familia con víctimas mortales está afincada en Zangozaldea, en las localidades de Kaseda y Liedena. Por su parte, la familia de los tres detenidos proviene de Lizarraldea, según las informaciones facilitadas por la propia Policía Foral, que no llegó a precisar la localidad de origen.

Los sucesos tuvieron lugar en la Calle Nueva, cerca de la Casa Consistorial. Esta localidad no llega al millar de habitantes y los sucesos generaron una enorme conmoción entre todos ellos. La familia de los tres fallecidos llegó al pueblo hace relativamente poco tiempo, unos cuatro años.

La reyerta sucedió tan tarde que no hubo reacción oficial por parte del Ayuntamiento.