El grupo francés PSA se hizo el mes pasado con la primera plaza del mercado automovilístico europeo, un logro que debe mucho a las dificultades de Volkswagen para adaptarse a las nuevas normas que han entrado en vigor en la UE.

El mercado europeo, que ha caído un 23,5% en setiembre tras una subida del 31,2% en agosto, se ha visto trastocado desde julio por la entrada en vigor, a partir del 1 de setiembre, del nuevo procedimiento de homologación de vehículos (WLTP), bastante más exigente que el anterior. Estos test realizados en laboratorio miden el consumo de carburante, así como las emisiones de CO2, de partículas, de óxidos de nitrógeno (NOx) y de otros elementos nocivos.

La Asociación Europea de Constructores de Automóviles (ACEA), que publicó las estadísticas el miércoles, ha reconocido que la caída de setiembre, con 1.090.000 de vehículos matriculados frente a 1.430.000 en el mismo mes del pasado año, se ha debido a «la introducción de los nuevos test WLTP que habían provocado un alza excepcional en agosto».

Los fabricantes otorgaron grandes descuentos en julio y, sobre todo, en agosto en vehículos que no hubieran podido ser comercializados a partir de setiembre o los registraron en sus propios concesionarios para venderlos más adelante como vehículos de ocasión.

En este mercado que se vio tan constreñido el mes pasado, el grupo PSA (marcas Peugeot, Citroën, DS, Opel y Vauxhall), aparentemente mejor preparado que Volkswagen, ha limitado el descenso de matriculaciones a un 7,7%, mientras que las de su rival alemán (marcas Audi, Seat, Skoda, Porsche...) se desplomaron un 48%.

Reparto del pastel

Como resultado de ello, la parte del pastel del grupo francés se ha elevado al 18,2%, contra el 15,8% para Volkswagen, que en los últimos años ha reinado en el mercado automovilístico del Viejo Continente con cerca de una cuarta parte de las matriculaciones.

«Hemos ejecutado a la perfección la aplicación de los nuevos estándares allí donde otros se han trastabillado», se felicitaba en declaraciones a AFP Maxime Picat, director para Europa del constructor tricolor.

«El efecto WLTP no es una sorpresa», reaccionó lacónicamente el grupo Volkswagen al ser requerido por AFP. Al otro lado del Rhin esperan un mes de octubre todavía difícil, antes de iniciar la recuperación en noviembre y diciembre.

Tercero en el podio europeo, Renault (que incluye a Dacia, Lada y Alpine) ha visto caer sus entregas un 27% en setiembre.

Todas las grandes marcas europeas han sufrido una bajada de dos cifras en setiembre pero, por estados, Francia limita los daños (-12,8%) mientras Alemania es la más afectada (-30,5%).

Pese a todo, teniendo en cuenta el conjunto de los primeros nueve meses del año, el mercado de la UE todavía registra una subida del 2,5% respecto al mismo periodo de 2017.