Ibai AZPARREN
DONOSTIA

Cerca de 200 figuras de la política y la cultura firman por un sistema federal

El documento fue impulsado, entre otros, por el jurista nombrado por el PSE para la reforma estatutaria, Alberto López Basaguren. Los firmantes respaldan que la reforma de la Constitución española debería ser previa al cambio de Estatuto de Gernika.

Alrededor de 200 intelectuales y representantes políticos y sindicales firmaron ayer en Bilbo a favor de una reforma constitucional para crear un sistema federal asimétrico. El documento fue impulsado, entre otros, por el jurista nombrado por el PSE para la reforma estatutaria, el catedrático de Derecho Constitucional Alberto López Basaguren, y cuenta también con el apoyo de la exvicepresidenta del Tribunal Constitucional Adela Asua, el alto cargo de la UE Eneko Landaburu, los escritores Bernardo Atxaga y Ramón Saizarbitoria y antiguos dirigentes de partidos y sindicatos como Andoni Pérez de Ayala (EB-IU), Javier Markiegi (EE), Javier Olaverri (EE), Carlos Trevilla (UGT), Josu Onaindi (CCOO) o Santiago Bengoa (CCOO).

El exmiembro del PNV Joseba Arregi y la juntera vizcaína de Podemos Asun Merinero también están entre los firmantes, junto a numerosos representantes del ámbito universitario como Manuel Montero, Pedro Luis Arias, Felipe Juaristi, Francisco Llera, Antonio Rivera o José Luis de la Granja.

El manifiesto, que aboga por un autogobierno territorial «amplio y profundo, fundamentado en la lealtad recíproca», considera que el régimen autonómico es equiparable a los sistemas federales pero que necesita una reforma por el tiempo pasado desde 1978 y por los «elementos extraños» que incluye la Constitución española en este ámbito, como la ambigüedad en la distribución de las competencias y la reserva al Estado de «lo básico».

El texto sostiene que en esa reforma constitucional es ineludible «el reconocimiento de peculiaridades y especificidades, de asimetrías», porque un sistema federal no es sinónimo de «uniformidad», pero siempre que esas singularidades no afecten a la «coherencia del conjunto ni a la equidad en el trato».

Los firmantes dejan claro que la reforma constitucional debería ser previa al cambio del Estatuto de Gernika porque pretender una reforma federalista desde un cambio estatutario es una «vía de corto recorrido» que generaría «frustración en la sociedad vasca» con su fracaso.