Durante los últimos meses se han multiplicado en las redes sociales los vídeos en los que se pueden ver jabalíes merodeando por los parques de Salburua. En diciembre apareció una hembra con sus crías por la carretera que conecta Zurbano y Arkaute, y en febrero un ejemplar se paseó durante tres noches por el barrio en busca de comida. No es de extrañar que el Gobierno local de Gasteiz alertara en enero de que existe una sobrepoblación de estos mamíferos, que afecta a los cultivos y pone en peligro la fauna de los humedales, ya que, según indicó, su proliferación tiene un impacto negativo sobre los anfibios, los reptiles y las aves que nidifican en el suelo.

Para hacer frente a esta situación el Gabinete de Gorka Urtaran autorizó a finales de enero la puesta en marcha de una «campaña de control de población», en la que participan cuatro arqueros que se colocan en plataformas elevadas, sobre árboles o andamios, y emplean cebos alimentarios. «La utilización de los arcos entraña un menor riesgo que las armas de fuego. El uso de las armas de fuego, además, provocaría huidas y un desplazamiento masivo de jalabas y corzos fuera del humedal. Además, el humedal de Salburua es una zona protegida y forma parte de la zona de seguridad delimitada en torno a Vitoria-Gasteiz, por lo que el uso de armas de fuego también está prohibido salvo en situaciones excepcionales», apuntó el Ejecutivo municipal, que el 29 de marzo anunció que en los dos primeros meses de campaña se han abatido cinco ejemplares.

Y avanzó que ya han obtenido el permiso de la Diputación para prolongar la campaña otros seis meses. «El objetivo que nos fijábamos era 30 al año. En estos seis meses, creemos que se deben eliminar veinte ejemplares de cara a evitar que la población siga aumentando. De acuerdo con el Plan de Gestión para la Población del Jabalí en el Territorio Histórico de Araba, el ratio de crecimiento es del cien por cien. Y en estos dos meses, a través de fototramperos, hemos comprobado que en el parque de Salburua hay un mínimo de 40 ejemplares», apuntó antes de incidir en que gracias a este nuevo permiso foral, cuatro personas siguen teniendo autorización para hacer las capturas.

La iniciativa del Gobierno local para acabar con la sobrepoblación de jabalíes no ha dejado indiferente a nadie, y se ha generado un debate en torno a la captura con arqueros. «La caza, bien con armas de fuego o por arqueros, no va a solucionar el problema porque no hay un control ni un seguimientos científico de la población de jabalí. Y lo único que van a hacer es causar un sufrimiento innecesario a estos animales y puede poner en peligro a las personas y especies de la zona. Salburua es una zona donde se puede trabajar en un proyecto piloto que no suponga el sacrificio de los jabalíes y se realice a través de vallados, repelentes y anticonceptivos», señaló hace un par de meses el concejal de Irabazi, Óscar Fernández, que propuso diversas alternativas.

Posibles alternativas

Así, planteó delimitar zonas con recursos olfativos, colocar vallados o delimitaciones con plantas, controlar las fuentes de alimentación y ubicar comederos en las zonas forestales, y emplear anticonceptivos para regular la natalidad de los jabalíes. Estas propuestas, tal como apuntó el edil, están recogidas en e Informe sobre la Gestión de Poblaciones de Jabalí y Medidas Alternativas de la Fundación para el Asesoramiento y la Acción en Defensa de los Animales (Faada), una entidad privada que tiene por objeto «promover el respeto por los animales en el ámbito social, legal y educativo».

También se han posicionado en contra del uso de arqueros los elkargunes de Medio Ambiente y de Convivencia, Defensa y Protección Animal. Los asistentes a estos espacios de deliberación sobre propuestas de ámbito municipal reclamaron al Ejecutivo local que «suspenda inmediatamente la matanza» de jabalíes en Salburua, «ya que el informe técnico aportado no justifica la decisión», y que facilite los datos referidos a los animales abatidos. Además, instaron al Ayuntamiento a reforzar el vallado de la balsa de Arkaute para impedir el acceso de jabalíes, y a que solicite a la Diputación foral que tome las medidas oportunas para prevenir los accidentes en las carreteras que lindan con el parque, mediante señalización y reducción de velocidad. También propusieron que se experimente con el uso de repelentes u otras medidas alternativas, y que se contacte con los responsables del ensayo que se está llevando a cabo en Barcelona para valorar la opción de capturar y esterilizar.

En el comunicado remitido a los medios de comunicación, los elkargunes remarcaron que «los casos de avistamientos de jabalíes en zonas urbanas de Salburua han coincidido con el inicio de la caza de estos animales en unas zonas donde hasta la fecha estaban tranquilos y por lo tanto el responsable de lo que pudiera ocurrir –en alusión a los accidente en las vías urbanas– será el Ayuntamiento y no un exceso de jabalíes». En la misma línea se pronunció la Asociación para un Trato Ético a los Animales (ATEA), que tildó de «escandaloso» el método elegido por el Consistorio. «ATEA desea hacer un llamamiento público a la ciudadanía, para que esta actúe en consecuencia, con el coraje y la responsabilidad ética tanto personal como colectiva que crímenes legales como este requieren. Si desde los colectivos proteccionistas ya cumplimos nuestro cometido, que cada cual haga lo propio, según dicte su conciencia», manifestó.