Javier MARTÍN
EFE

Refuerzo de posiciones en Trípoli en espera de la batalla final

El gobierno de Acuerdo Nacional (GNA), impuesto por la ONU en Trípoli, y las fuerzas bajo el mando del mariscal Jalifa Haftar, hombre fuerte del país, comenzaron ayer a reforzar sus posiciones en el eje sur en previsión de la gran batalla por el control de la capital.

Milicias procedentes de la ciudad occidental del Zintan, bajo el mando del señor de la guerra Idriss Mahdi, llegaron anoche a los alrededores del antiguo aeropuerto internacional para reforzar la posición del LNA de Haftar.

El aeródromo, en desuso desde hace un lustro, fue conquistado por las tropas orientales poco después de lanzar su ofensiva sobre la ciudad el pasado 4 de abril, y es el pilar clave sobre la que parece asienta su ofensiva Haftar, quien pretende afianzar la posición antes que a principios de mayo empiece el mes de ayuno de Ramadán y utilizarla para extender los combates a los barrios del norte.

Por su parte, unidades fuertemente armadas partieron en las últimas horas de la ciudad-estado de Misrata, situada a unos 200 kilómetros al oeste de Trípoli, para reforzar al GNA.

Sin avances

El refuerzo en el frente sur se produce escasas horas después de una intensa batalla en Ain Zara y otras localidades del eje sur, a escasos veinte kilómetros del centro de la capital, que fue interrumpida por una fuerte tormenta de arena. Pese a la dureza de los duelos de artillería y las escaramuzas con armas ligeras, ninguno de los dos contendientes logró avances significativos.

La batalla por Trípoli, que ha segado ya la vida de 260 personas y desplazado a más de 35.000, es crucial para el futuro del país.