La ciudad sueca de Gotemburgo acogió ayer la plantación de un retoño del árbol de Gernika. El acto tuvo lugar en Jonsered Gardens, jardines que cuentan con un patrimonio botánico que se remonta al año 1800 y que «son «un ejemplo de vanguardista combinación de cultivo ecológico y responsabilidad social».

Las JJGG de Bizkaia han donado este retoño a la ciudad como tributo y en agradecimiento por haber acogido al lehendakari José Antonio Agirre y haber facilitado su salida y la de su familia rumbo a América desde el puerto de Gotemburgo en junio de 1941, huyendo de los nazis.

En la ceremonia de plantación del esqueje del árbol de Gernika participaron, junto con las autoridades de la municipalidad sueca de Partille-Gotemburgo (Pia Sundh y Eva Carlsson), el coro bilbaino Garaizarko Matsorriak, que interpretó canciones del folklore vasco: ‘‘Festara’’ e ‘‘Illunabarra’’ de Raimundo Sarriegi, ‘‘Ai hori begi’’ de Pedro Retana, y ‘‘Adio Euskal Herriari’’ de José María Iparragirre.

Xabier Agirre, miembro de la coral de Garaizar y sobrino del primer lehendakari, explicó las vicisitudes vividas por su tío en el exilio. El acto comenzó con una conferencia de Ingmar Söhrman, profesor de la Universidad de Gotemburgo, sobre el “Guernica” de Picasso y sobre la importancia del árbol de Gernika como símbolo de paz.