El Gobierno de Iñigo Urkullu no ha comenzado el curso político con los deberes hechos en materia de educación, según entienden LAB y ELA, que ayer se movilizaron en Lakua para exponer sus críticas y propuestas.

LAB resaltó que «a día de hoy faltan profesoras y profesores en las aulas», lo que es debido a «una falta de recursos patente para realizar el trabajo que conlleva adjudicar miles de empleos con todas las garantías».

Por ello, reprochó al Departamento de Educación «dejadez y falta de profesionalidad», precisando que el objeto de sus críticas son «los responsables políticos dirigidos por la consejera Cristina Uriarte».

«Haciendo oídos sordos a las peticiones de sustitución realizadas por diferentes colegios, se están ofreciendo al azar plazas para la sustitución del profesorado. Como consecuencia de ello –añadió–, muchos profesores y profesoras han tenido que aceptar peores condiciones laborales que las que les correspondería a su antigüedad. En ocasiones, en puestos que están a cientos de kilómetros de sus casas, condenadas a aceptar jornadas reducidas o quedarse en el paro».

Además, esta central considera que «adjudicar los puestos al azar y sin garantías choca frontalmente con el reglamento de profesorado interino», por lo que expresó su disposición a abrir la vía jurídica con las personas afectadas. Destacó también que este inicio de curso «vuelve a demostrar que la Escuela Pública Vasca no es una prioridad» para el Ejecutivo que preside Urkullu.

Acuerdo para sustituciones

Por su parte, ELA indicó que el Departamento de Educación ha dado comienzo al curso escolar «con más recortes y precariedad». Este sindicato considera que el Gobierno y la consejera Uriarte lanzan mensajes «con palabras muy bonitas», pero «la situación ha empeorado» respecto al curso anterior.

Como «claro ejemplo» de su denuncia, señaló que la eventualidad entre el profesorado «está en un inaceptable 40%, de forma que 4 de cada 10 profesoras son eventuales». ELA volvió a recordar que, tras las movilizaciones del curso anterior, «la única medida concreta» en el acuerdo firmado por el Departamento de Educación con LAB, Steilas, CCOO y UGT, «que no respondía a los problemas y reivindicaciones que nos habían llevado a la huelga, era la de hacer las sustituciones desde el primer día, pero ni siquiera esto se ha cumplido».