JONAN FERNANDEZ ERDOZIA
Secretario General de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación del Gobierno Vasco

Puntualización

En su artículo publicado en este periódico el pasado 6 de noviembre, Jose Mari Olarra denuncia que en la entrevista que me hizo el diario Berria, publicada el sábado 2 de noviembre, defendí que el acercamiento de presos debe condicionarse a que estos hagan una autocrítica. Invito a quien tenga interés en conocer lo que dije a que revise la entrevista.

Sostuve la posición conocida del Gobierno Vasco que puede resumirse en tres puntos: (1) el acercamiento no tiene precondiciones, debe procederse a él por razones legales, humanitarias y sociales; (2) contribuiría a un cambio global en la política penitenciaria una reflexión autocrítica sobre las vulneraciones de derechos humanos y (3) hay que crear condiciones que favorezcan ese cambio en la política penitenciaria mediante el logro de consensos efectivos.

El acercamiento es una parte de la política penitenciaria, pero el cambio de la política penitenciaria es más que el acercamiento. Tiene que ver principalmente con la apertura a las posibilidades legales de reinserción y resocialización, y es en este ámbito –no en el del acercamiento– en el que el distanciamiento crítico con respecto al delito cometido ayudaría a crear condiciones favorables para el cambio de la política penitenciaria en materia de procesos de reinserción.