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JERUSALÉN

La geopolítica marca el 75 aniversario de la liberación de Auschwitz

Israel capitalizará la conmemoración en Jerusalén del 75 aniversario de la liberación de los campos nazis de Auschwitz para presionar a los numerosos líderes que asisten para que aumenten la presión contra Irán, y reforzar el reconocimiento de la ocupación de Palestina.

Israel ha comenzado a recibir a casi medio centenar de dirigentes mundiales, entre ellos los presidentes ruso, Vladimir Putin; francés, Emmanuel Macron, y el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, en el 75 aniversario de la liberación por parte del Ejército soviético de los campos nazis de Auschwitz, símbolo del exterminio de millones de judíos, gitanos, homosexuales, disidentes políticos y prisioneros de guerra.

Desde hoy, con un gran despliegue de fuerzas de seguridad, los líderes, en su mayoría europeos, debatirán sobre antisemitismo, pero también de geopolítica en el oeste asiático.

«Vamos a hablar de Irán, de los acontecimientos en la región y de la forma de reforzar nuestras relaciones», anunció el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que aprovecha para capitalizar la conmemoración en favor de su política hostil a Teherán, la colonización de Palestina y su campaña electoral.

El programa de actos está centrado en la lucha contra el antisemitismo en Occidente, pero Netanyahu pretende persuadir al resto de líderes –sobre todo europeos y ruso– de que aumenten la presión contra Irán y compara el exterminio llevado a cabo por el régimen nazi con la postura de Teherán hacia Israel.

«Después del Holocausto, se creó el Estado de Israel, pero los intentos por destruir al pueblo judío no han desaparecido. Irán declara cada día que quiere borrar a Israel de la faz de la Tierra», declaró esta semana.

El presidente israelí, Reuven Rivlin, acogió a los dirigentes para una cena en su residencia oficial en Jerusalén. «No esperábamos una respuesta tan importante de tantos dirigentes», afirmó el multimillonario israelo-ruso Moshe Kantor, presidente del Consejo judío europeo y organizador de este quinto Foro mundial del Holocausto.

El presidente ruso estará en el centro de las conmemoraciones en Jerusalén, donde prevé inaugurar un monumento en honor de las víctimas del asedio de Leningrado por los nazis.

La figura ausente será el presidente polaco, Andrzej Duda, que, en un contexto de tensiones con Putin y las autoridades israelíes, no fue invitado a tomar la palabra.

Memorial levantado sobre el olvido

En un Foro mundial del Holocausto que reivindicará el valor de la memoria y rechazará el negacionismo, la propia ubicación del memorial Yad Vashem, centro de las conmemoraciones, evoca el olvido de las masacres de la ocupación sionista. El memorial se encuentra al lado de Deir Yassin, una aldea palestina –borrada del mapa y hoy convertida en centro siquiátrico– que fue escenario en abril de 1948 de la matanza de unas 250 personas –la mayoría ancianos, mujeres y niños– entre degollamientos y violaciones, a manos de bandas paramilitares judías, un hecho que las autoridades sionistas niegan o relativizan en la actualidad. El hecho de llevar la conmemoración de la liberación de Auschwitz a Jerusalén pone además sobre la mesa la ocupación y, sobre todo, el rechazado «plan de paz» de Washington, el apoyo de EEUU a las colonias israelíes y el proyecto de anexión israelí del Valle del Jordán, temas que abordarán Putin, Macron, y el príncipe Carlos, cada uno por su lado, con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas.GARA