Julen Martija, junto a Ander Imaz, es el contrapunto a un Parejas tomado por los pegadores. Sin llegar a cumplir los 23 años, el pelotari de Etxeberri está plenamente asentado en la elite y, en un campeonato que no se le presentaba nada sencillo, está a un solo punto de sellar, junto a Joseba Ezkurdia, su tercera clasificación consecutiva para las semifinales del Parejas, algo que conseguirán directamente mañana mismo si son capaces de vencer a Laso-Albisu en Urduliz.

El logro no sería baladí, pues en los últimos cinco años, sólo tres zagueros, Rezusta (16-17-18-19), Zabaleta (17-18-19-20) y Untoria (15-16-17) lo han conseguido, con el mérito añadido de que el joven zaguero de la Sakana lo lograría en sus tres primeras participaciones, las dos primeras junto a Jokin Altuna. En este sentido, está en condiciones de mejorar la marca de un Beñat Rezusta que no logró meterse en su estreno en el torneo, junto a Julen Retegi en 2015, pero que sí lo ha venido repitiendo todos los años desde entonces, a expensas de lo que suceda este curso. Eso sí, el más regular durante estos últimos ejercicios ha sido un José Javier Zabaleta, presente en seis de las últimas ocho semifinales del torneo.

En la elección de ayer en Urduliz, Martija no se atrevía a afirmar que el de ahora sea su mejor momento deportivo, «la verdad es que estoy jugando muy a gusto y de forma estoy bien», pero reconoció que la confianza es plena «tras haber ganado los últimos partidos salvo el de Buñuel» y que «sí que quizá es el mejor momento de la pareja, ya que a mitad de campeonato tuvimos unos partidos que se nos fueron por poco y sí que pierdes confianza, peo ahora estamos mejor».

En lo personal viene de cuajar grandes partidos ante pegadores como el propio Zabaleta y Mariezkurrena y ante otros pelotaris más de su perfil como Ander Imaz y su convivencia junto a Joseba Ezkurdia también está siendo plácida. «Todas las semanas digo lo mismo, Joseba me ayuda un montón estoy muy a gusto jugando con él y no me puedo quejar».

Rematar la faena

Sin embargo, todavía les queda un paso para redondear una primer fase de sobresaliente. «Tenemos que conseguir una victoria, pero muchas veces, cundo estás tan cerca y sólo falta una victoria, es como que tienes más presión y tenemos que centrarnos en hacer un buen partido e intentar hacer las cosas como en las últimas jornadas».

De momento dice sentirse tranquilo, pero reconoce que «una vez estando aquí, no ganar ninguno de los dos partidos sería un palo porque en play off puede pasar cualquier cosa y tenemos que intenar ser segundos». De hecho, el año pasado tuvieron que sufrir muchísimo para lograr el pase en la última jornada en Donostia. «Por fuera no parece que esté nervioso, siempre me lo intento guardar, pero por dentro sí que a mitad de partido o así sí que aparecen unos miedo o unos nervios pero de normal lo suelo llevar bastante bien», explicó.

Lo bueno es que la inercia este año es ascendente y la clave mañana puede ser eso que hacen tan bien, trabajar y fallar poco.

Zubizarreta, primer debut en Baiko

El ataundarra Iraitz Zubizarreta dará el salto a profesionales el próximo 8 de marzo en el frontón de su pueblo, convirtiéndose así en el primer pelotari que da el salto con Baiko, ya que el último en pasar con la promotora de Bilbo fue el azpeitiarra Jon Alberdi en setiembre de 2018, cuando la empresa todavía se llamaba Asegarce.

Iraitz Zubizarreta, que ya jugó algún partido con profesionales en el propio Auzoeta siendo aficionado, llega avalado por sus resultados del último año, con txapelas en el DV, Antiguo, la Liga Vasca, el Joxean Tolosa, el Elite del cuatro y medio, Lezo o Urduliz, aunque una lesión en su dedo le ha frenado su progresión los últimos meses.

Eso sí, parece volver a adquirir la confianza necesaria y jugará la final del Soroa en Tolosa el día 23. El goierritarra había firmado un precontrato con Baiko en octubre y no ha necesitado demasiado tiempo para convencer a los técnicos con du depurada técnica. J.O.