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La DOCa Rioja hace balance positivo de 2019 pese a una nueva caída de las ventas

El Consejo Regulador de la DOCa Rioja ha calificado 2019 de «año de transición» tras una caída de casi el 3% en las ventas de vino. En cuanto a la iniciativa de ABRA, ha replicado: «Aquí están los que quieren».

Las ventas del vino de Rioja alcanzaron los 255,91 millones de litros –351 millones de botellas– en 2019, lo que representa una «ligera» caída del 2,84% respecto al año anterior, según el balance anual de comercialización del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja.

El presidente del Consejo Regulador, Fernando Salamero, hizo públicos ayer estos datos durante una rueda informativa, en Logroño, en la que estuvo acompañado por el director general, José Luis Lapuente.

Salamero indicó que 2019 ha sido «un año de transición para afrontar la nueva década», afirmando que los datos de comercialización suponen una «importante recuperación» en relación a la tendencia registrada en 2018, cuando las ventas cayeron el 7,35%.

En el mercado estatal se vendieron el año pasado 161,62 millones de litros, un 3,18% menos que en 2018, mientras que al exterior, repartidos en 124 países, llegaron 94,28 millones de litros, un 2,24% menos.

El principal mercado exterior es Gran Bretaña, con 29 millones de litros vendidos y una cuota del 30,76% del total, seguido de Alemania (12,80 millones), Estados Unidos (9,54 millones), Suiza (5,30 millones), Rusia (3,74 millones), Países Bajos (3,69 millones), Canadá (3,59 millones) y China (2,88 millones).

Planteamiento ante ABRA

Por otro lado, el presidente del Consejo Regulador de la DOCa Rioja comentó que en este organismo «están los que quieren», añadiendo que la Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa (ABRA) no ha comunicado que se quiera marchar.

A preguntas de los periodistas, Salamero aludió así a la propuesta de ABRA de crear la denominación “Viñedos de Álava”, sobre la que dijo que el Consejo Regulador se informará y se asesorará antes de presentar sus alegaciones.

Incidió en que las bodegas que quieren formar parte de la DOCa «se dan de alta voluntariamente y también de baja». Señaló que él representa a todos los inscritos en la DOCa, procedentes de La Rioja, Nafarroa, Araba y una pequeña parte de Burgos, y no quiso pronunciarse sobre la decisión que se conoció ayer de siete bodegas de ABRA que anunciaron que abandonarán la asociación alavesa.

El presidente del Consejo Regulador precisó que los únicos datos que han tenido de la petición de ABRA es una «escueta» publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de la puesta en marcha de “Viñedos de Álava”, por lo que han demandado «más información como parte implicada para, después, presentar las alegaciones que corresponden».

Salamero no entró a detallar el contenido de esas alegaciones y comentó que el Consejo Regulador aún no sabía si procederá trasladar este asunto a las autoridades reguladoras de la UE.