Koldo LANDALUZE
CRÍTICA «Human Lost»

Los monstruos de la élite

Poco antes de la irrupción del coronavirus, la cartelera albergó un buen número de animes, lo que certificó la gran cantidad y variedad de proyectos de estas características que adquirieron gran relevancia debido a la gran acogida que obtuvieron en el circuito internacional de festivales de cine. Siguiendo la estela de películas como “El tiempo contigo”, de Makoto Shinkai; “Ride Your Wave”, de Masaaki Yuasa o “Los niños del mar”, de Ayumu Watanabe; la última película de Fuminori Kizaki nos guía por otro sendero bien diferente en el que gobiernan las tonalidades oscuras y donde se recupera una de las temáticas habituales de la ciencia ficción japonesa, el futuro postapocalíptico. El recorrido artístico de Kizaki es cuanto menos singular. Tras su brillante fusión de hip hop y katanas en “Afro Samuari”, se embarcó en un proyecto mediocre que pretendía ser una prolongación cinematográfica del videojuego “Bayonetta” de Platinum Games. Tras la mala acogida que tuvo este anime, su autor dejó a un lado el formato fílmico y cumplida su etapa dentro de la industria del videojuego, ha retornado a la pantalla respaldado por el material literario de Osamu Dazai. De estética ciberpunk, “Human Lost” es una reiteración de temas y trazos que ya hemos visto en infinidad de ocasiones.

En esta distopía, la humanidad es, literalmente, ganado al servicio de los grandes potentados. Esta élite económica se sirve de nanomáquinas que los transforman en seres inmortales. Un joven decide infiltrarse allí donde vive esta élite social y descubrirá los inquietantes secretos que oculta. Los dilemas existenciales que otorgaban sentido al original literario de Dazai, son reconvertidos en un vibrante espectáculo de sangre y chips que lejos de apostar por hipótesis mucho más valientes, se acomoda en una narración que bebe en exceso del tópico.