Idoia ERASO
BAIONA

Cuatro acusados por la agresión al chófer de autobús de Baiona

La Fiscalía de Baiona informó ayer de lo ocurrido durante la agresión del domingo contra el conductor de autobús Philippe Monguiollot, que sigue en situación de muerte cerebral en el hospital de la ciudad. Cuatro personas han sido acusadas, dos de ellas por «intento de homicidio voluntario». La familia ha organizado una marcha silenciosa para hoy. El Ministro de Transportes se desplazó a Baiona para mostrar su apoyo a los compañeros de la víctima.

El fiscal de Baiona, Jérôme Bourrier, ofreció ayer por la tarde una rueda de prensa para explicar lo ocurrido durante la agresión, el domingo, al conductor de autobús Philippe Monguiollot las acusaciones que pesan contra las cuatro personas que de una u otra manera participaron en el citado ataque.

Dos jóvenes de 22 y 23 años han sido acusados de «intento de homicidio voluntario». Los otros dos, de «omisión de auxilio», y uno de ellos también de «acoger a criminales» en su casa. Se encuentran a la espera de pasar ante el juez de instrucción. En un primer momento fue detenida una quinta persona, un menor que ha quedado en libertad sin cargos.

La comisaría de Policía de Baiona se encargó inmediatamente de la investigación y, en estos momentos, sigue recabando testimonios sobre lo ocurrido el domingo.

Según explicó el fiscal adjunto, Marc Mariée, la agresión tuvo lugar a las 19.15 horas en el autobús 210 de la línea Choronoplus, a la altura del barrio de Balichon, en dirección a Biarritz. Los testimonios que está recabando la Policía apuntan que tres personas se encontraban dentro del vehículo con un perro y en el barrio de Balichon una cuarta persona montó en el autobús. Cuando el conductor les pidió que se pusieran la mascarilla, los hombres le gritaron y lo tiraron fuera del vehículo de un empujón.

Los dos hombres que han sido acusados de «intento de homicidio voluntario» golpearon violentamente al chófer en la parte superior del cuerpo, sobre todo en la cabeza. Siempre según la versión de la Fiscalía, tras la agresión se refugiaron en la casa de la persona que ha sido acusada de acogerles, en la que aparentemente se encontraba el menor fue también arrestado y quedó en libertad sin cargos.

Mariée añadió que se trata de un caso de «violencia extrema, del que no se puede explicar la causa». Los dos jóvenes acusados de «intento de homicidio» tienen antecedentes penales, aunque el fiscal adjunto explicó que no se trata de delitos de ese tipo o de violencia. Afirmó que algunos de los acusados no residen en la zona de Baiona.

La esposa, hijas, familia y los compañeros de trabajo del agredido han convocado para hoy una «Marcha blanca por Philippe», con el apoyo de las instituciones locales. El cortejo partirá a las 19:30 horas de la parada de Balishon para terminar en el patio del Hospital de Baiona en el que el agredido se encuentra ingresado. La familia ha invitado a los participantes a acudir vestidos con prendas blancas.

A nivel estatal, las diferentes instituciones responsables del transporte han previsto hacer una parada en todas las redes a la misma hora de la marcha y también se mantendrá un minuto de silencio.

El ministro francés de Transportes, Jean-Baptiste Djebbari, acudió ayer a la capital labortana para expresar su apoyo a los compañeros de trabajo También estuvieron presentes el alcalde de Baiona y presidente de la Mancomunidad Vasca, Jean-René Etchegaray, y el alcalde de Angelu y vicepresidente responsable de la movilidad, Claude Olive.

Los conductores se quejan de falta de seguridad e indicaron que el nuevo protocolo sanitario que hace que los pasajeros entren por la puerta central, complica las labores de control. No obstante, apuntaron que «los insultos o las actitudes agresivas no son de ahora, vienen de antes, y hace falta que se refuerce el personal en los servicios para evitar que todo recaiga en el conductor».

Familia y compañeros han recibido numerosos mensajes de apoyo en las redes sociales y muchos usuarios han denunciado que se trata de una «agresión incomprensible» y han querido hacer llegar el mensaje de que se trata de «una violencia que no es propia de esta ciudad».