Natxo MATXIN
COPA

Los penaltis truncan la ilusión

ALMERÍA 0

OSASUNA 0

 

Osasuna acabó con su trayectoria copera en la tanda de penaltis, en un estadio de los Juegos del Mediterráneo donde no impuso su presumible mayor poso ante un equipo bisoño, pero que supo llevar la iniciativa y se mantuvo vivo hasta el final, junto a que los rojillos no supieron materializar algunas de sus claras ocasiones.

Quitando a Manu Sánchez, Javi Martínez y Enric Gallego, el once que puso en liza Jagoba Arrasate en el estadio de los Juegos del Mediterráneo tuvo prácticamente carácter titular, en esta ocasión con Moncayola haciendo de ancla y combinando la presión arriba con unas líneas más replegadas una vez el Almería se hacía con el control del esférico.

Y es que los de José Gomes, además de juventud, demostraron ser un buen equipo en la salida y circulación de balón, con quizás demasiadas concesiones en este sentido por parte de la escuadra navarra, que inquietó en la estrategia y el juego aéreo. De hecho, le faltó nada para estrenar el marcador en un par de corners que sendas manos salvadoras de Fernando y un defensa sacando bajo palos impidieron que los dos cabezazos consecutivos de David García y un tercero de Gallego finalizasen en las mallas, cuando ya se cantaba el gol rojillo.

Osasuna metía miedo en esta faceta, pero los anfitriones no cejaron en su empeño de triangular hasta los dominios navarros, aunque la cerrada defensa visitante impedía cualquier tipo de alegría. Los almerienses tenían que conformarse en más de una acometida en intentarlo con disparos muy lejanos que no encontraron portería.

Lo más cerca que estuvo el cuadro andaluz de perforar la meta defendida por Juan Pérez fue en una falta muy bien botada por Lazo, a la que le faltaron un par de palmos para encontrar la escuadra. Eso y una colada por la derecha de Appiah, que se marchó primero de Manu Sánchez y después de David García, fueron lo más destacado en ataque por parte local antes del descanso.

Cambios acertados

No cambiaron las tornas en el inicio de la segunda mitad, con un descarado Almería, que siguió confiando en su toque y sobeteo de la pelota como mejor fórmula para lograr el pase. A Osasuna, mientras tanto, le tocaba aguantar atrás, sin permitir peligro alguno por parte de los pupilos de José Gomes.

En todo caso, el devenir del choque no gustaba a Arrasate por sus gestos desde el banquillo y porque movió ficha faltando media hora para la conclusión. El técnico de Berriatua renovó gran parte del medio campo, con la entrada de Oier y Lucas Torró, y el equipo lo agradeció. Las fuerzas se equilibraron y ahora los rojillos disfrutaron de una mayor posesión y acercamientos al área andaluza, si bien las ocasiones más claras volvieron a forjarse mediante el balón parado.

Tres nuevos saques de esquina provocaron un empalme de Moncayola arriba y dos testarazos de Roncaglia –centrado– y Oier, pero no se materializaron en nada, mientras que el Almería en su única aproximación a punto estuvo de mandar al traste todo el trabajo en el 88. Ya en el periodo de prolongación, Calleri, por partida doble, pudo evitar la tanda de penaltis –la mandó arriba de manera incomprensible en el 115– y también Sadiq, pero lo evitó un valiente Juan Pérez.