GARA
RANGÚN

Birmanos siguen saliendo a las calles cuando se cumplen cien días del golpe

Los birmanos volvieron ayer a expresar su rechazo a la junta militar en protestas en diversas partes del país a pesar de la represión de los uniformados cuando se cumplen 100 días desde el golpe de Estado.

En Rangún, la mayor ciudad del país, los manifestantes corearon consignas y alzaron tres dedos, el gesto de la saga de “Los juegos del hambre” que se ha convertido en símbolo de resistencia contra los militares, que han matado a al menos 781 civiles, incluidos 52 menores.

Para evitar la represión, algunos manifestantes organizan protestas más pequeñas o las llamadas «relámpago», que se disuelven en pocos minutos para impedir que los militares, que están usando munición real y llevando a cabo detenciones arbitrarias, tengan tiempo de llegar al lugar. Algunos activistas y manifestantes han muerto durante su detención, como el poeta Khet Thi, cuyo cadáver fue entregado el domingo a su familia con signos de tortura tras ser arrestado por participar en las protestas contra la Junta.