Una amplia representación de los sindicatos vascos (ELA, LAB, UGT, ESK, Steilas, CGT/LKN, CNT, EHNE, Hiru y Etxalde) reclamó ayer el archivo del sumario 13/13 y el fin de la política penitenciaria de excepción. Lo hicieron en la última concentración sindical de este curso dentro de la iniciativa Izan Bidea, que tuvo lugar ayer en Bilbo.

Además de pedir el fin de la política de excepción, los sindicatos mostraron su rechazo por el enjuiciamiento de ocho personas por su labor en la asistencia jurídica y social a presos en el marco del sumario 13/13. En este sentido, muestran su preocupación y rechazo a las irregularidades relatadas por las personas afectadas, mencionando expresamente «la práctica de la tortura durante el periodo de incomunicación»

Por ello, solicitan el archivo de la causa, «tanto por las irregularidades mencionadas como por ser un acto anacrónico que contraviene la demanda mayoritaria en nuestra sociedad por un escenario de paz y convivencia democrática».

«Excepcionalidad judicial»

«Al igual que hemos reclamado reiteradamente el fin de la excepcionalidad respecto a la política penitenciaria, solicitamos también el fin de la excepcionalidad judicial. Los ciudadanos y ciudadanas vascas tienen derecho a ser juzgados en el tribunal ordinario que les corresponda», subrayaron los sindicatos tras la concentración de ayer.

Asimismo, anunciaron que tras el periodo veraniego retomarán la dinámica de concentraciones semanales. La cita es el 17 de setiembre en la plaza Elíptica de Bilbo. «Seguimos poniendo en valor la confluencia de la mayoría de siglas sindicales y el compromiso y constancia de la dinámica que, por encima de nuestras diferencias, nos une en esta reivindicación. Tenemos claro que esta dinámica debe continuar, pues a pesar de que se han dado pasos en cuanto a acercamientos y progresión de grados, aún estamos lejos de dar por zanjadas las reivindicaciones que hacemos: el acceso a los beneficios penitenciarios contemplados en la legislación ordinaria, la excarcelación de aquellos que padecen enfermedades graves o incurables, la reincorporación al mundo laboral de aquellas personas que son excarceladas, así como la revisión de la legislación para el alargamiento excepcional de las condenas», constataron los sindicatos.

El 31% de los presos y presas vascas están en Euskal Herria

Behatokia publicó ayer un nuevo informe monográfico que recoge la evolución de la política aplicada a los presos y presas vascos. La fotografía resultante es claramente diferente de la que había hace medio año, subrayó Aitzol Asla, aunque lamentó que el ritmo sea demasiado lento. «Actualmente, son 210 las personas presas por delitos de motivación política, cuya inmensa mayoría se identifica con los planteamientos de EPPK. 30 son mujeres, 180 son hombres», indicó en una comparecencia junto a Teresa Toda.

Señaló que «son datos significativos, y más si los comparamos con los que difundimos hace seis meses: En enero, eran solo 25 las personas en cárceles de Euskal Herria, el 13% del total. Hoy son 57, el 31%. El 41% se encontraba en cárceles entre 150 y 400 kilómetros, hoy es el 61%. Entonces, el 18% estaba en prisiones entre 400 y 600 kilómetros de distancia, ahora ha descendido al 7%, y del 28% que estaba a más de 600 kilómetros se ha pasado al 1% de hoy».

Por otro lado, ayer se repitieron las concentraciones para reivindicar los derechos de los represaliados vascos en Antzuola (25), Ugao (47), Lekeitio (96), Ondarroa (118), Oiartzun (45), Bera (45), Galdakao (62), Getaria (25), Amurrio (50), Legorreta (21), Etxarri Arantz (66), Mutriku (35), Bergara (45), Deba (42), Zarautz (95), Iruñea (90), Barañain (31), Arbizu (38), Oñati (61), Durango (68) y Orereta (98). GARA