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BILBO

Valoración positiva general con más matices en el PNV que en el resto de partidos

Salvo en el caso en absoluto sorprendente del PP y de Vox, la Declaración del 18 de Octubre fue recibida de forma positiva por todos los agentes políticos de Euskal Herria, y también por parte de figuras destacadas de la política española e incluso del propio Ejecutivo de Madrid.

Es el caso, por ejemplo, de las ministras de Derechos Sociales y de Igualdad, Ione Belarra e Irene Montero, respectivamente. La primera, que es también secretaria general de Podemos, valoró que es «obligación de los demócratas reconocer el paso» formalizado ayer por Arnaldo Otegi y Arkaitz Rodríguez, mientras que Montero consideró la declaración «un paso necesario para la reparación y la convivencia que refuerza nuestra democracia». En parecidos términos, el exvicepresidente del Gobierno y fundador de la formación morada, Pablo Iglesias, calificó la declaración de la izquierda independentista como «muy importante». A través de las redes sociales, opinó que reconocer la importancia del documento «es una cuestión de justicia y de sentido de Estado».

Desde el mismo partido, la coordinadora general de Podemos Euskadi, Pilar Garrido, saludó el paso «fundamental» de Aiete.

En el PSOE, socio mayor del Ejecutivo, el primero en reaccionar fue el secretario de Organización y diputado por Nafarroa, Santos Cerdán, quien también en las redes señaló que «el reconocimiento del daño y el dolor es un paso imprescindible» y añadió que «hoy más que nunca hay que poner en valor la convivencia y el diálogo, claves en una democracia fuerte. Con memoria y respeto. Con libertad».

Más elocuente fue el también miembro de la Ejecutiva del PSOE Patxi López, quien en una rueda de prensa junto al nuevo portavoz de su partido, Felipe Sicilia, declaró que «valoramos que reconozcan ese sufrimiento por tanto años de terrorismo y se comprometan a mitigarlo». El exlehendakari, que hoy participará en un acto en Gernika junto al expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, apostilló que «cuando uno sabe lo que cuesta dar un paso en ese mundo valora positivamente ese reconocimiento que los demócratas llevan años reclamando».

Para el PNV, «un paso corto»

Más tarde que PSOE, Unidas Podemos y que la mayoría de los agentes, el PNV valoró por la tarde que «la Izquierda Abertzale ha dado hoy un paso en la buena dirección», pero añadió, a continuación, que «nos vemos en la obligación, ética y política, de afirmar que se trata de un paso corto e insuficiente, más aún si tenemos en cuenta que ha tenido diez años para darlo». En un comunicado, el EBB de la formación jeltzale consideró que «esta declaración incorpora aportaciones positivas para la construcción de una nueva convivencia y para la necesaria reparación de las víctimas de ETA, aunque con omisiones en aspectos clave en los que la izquierda abertzale y el mundo que dio cobertura a la organización armada aún tienen un trecho ético y político que recorrer».

De forma más escueta, pero en el mismo tono, Iñigo Urkullu quiso dar mayor realce a los matices que al sentido positivo de la valoración, y apuntó que si bien Otegi y Rodríguez «han mostrado su cercanía a las víctimas» y admitió que «es un paso adelante. Era necesario, es positivo», criticó que «no han realizado ninguna valoración sobre la violencia que generó el dolor de las víctimas y la sociedad», lo que «también es necesario».

«Diez años después de Aiete, de una pista de aterrizaje que tuvo sus claroscuros, tal como ocurrió entonces, nuevamente ahora una nueva pista de aterrizaje que no era necesaria», expuso el mandatario jelkide tras un encuentro con diplomáticos.

La parquedad del lehendakari contrasta con la intervención elogiosa de su homólogo catalán, Pere Aragonès, quien subrayó que la declaración «es de una enorme relevancia y responsabilidad». «Sabiendo que la paz y la palabra son el camino, hace falta acompañar los pasos que también vendrán en el futuro», expuso el president de la Generalitat, quien expresó además «el compromiso de acompañar el proceso de paz en los años que vendrán». De igual modo, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, definió la intervención de Arnaldo Otegi y Arkaitz Rodríguez como una «declaración valiente».

También saludó la Declaración del 18 de Octubre Carles Puigdemont, para quien lo ocurrido ayer en Aiete representa «la cristalización de un trabajo lento, silencioso y duro».

Por su parte, Iñigo Errejón, líder de Más País, se sumó a quienes valoraron positivamente el documento, que calificó de paso «importante y necesario».