GARA
BOGOTÁ

Granda reprocha al Gobierno colombiano su intento de arresto en México

El exnegociador de las FARC Rodrigo Granda denunció que la reactivación de una «orden dormida de Interpol» fue una maniobra de «altos funcionarios» del Gobierno colombiano contra el Acuerdo de Paz.

Rodrigo Granda, exnegociador plenipotenciario de las FARC-EP en las conversaciones de La Habana con el Gobierno colombiano de Juan Manuel Santos y miembro del partido Comunes, llegó sobre las 05.56, hora colombiana, al aeropuerto internacional de El Dorado, en Bogotá, procedente de Ciudad de México, donde las autoridades migratorias mexicanas le impidieron la entrada al constatar que se había activado una «circular roja» emitida por Interpol Paraguay.

En declaraciones a los numerosos periodistas que se acercaron al aeropuerto colombiano, Granda aseguró que en ningún momento estuvo detenido y agradeció las gestiones realizadas tanto por México como por Cuba y Noruega –países garantes de los diálogos de La Habana– y de la ONU – para solventar esta situación, que calificó de «ataque» contra los Acuerdos de Paz y la misma Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), «nuestro juez natural y quien me dio el permiso de salida de Colombia». Granda tenía previsto participar junto a otros miembros de su partido como Pastor Alape en un seminario en México invitado por el Partido del Trabajo (PT).

«No ha pasado nada del otro mundo, simplemente siguen las provocaciones contra el proceso de paz. Algunos altísimos funcionarios del Gobierno que no están de acuerdo con el proceso, que no reconocen que nosotros hemos venido cumpliendo activaron una orden dormida de Interpol Paraguay. Yo mismo fui a las oficinas de Interpol Colombia y no me aparecía absolutamente nada», subrayó.

Insistió en que lo ocurrido es «una conspiración» del Gobierno de Iván Duque. A los detractores del proceso les dijo que «este Acuerdo de Paz vino para quedarse, es un acuerdo muy robusto en contraposición de lo que piensan alguno, y nosotros estamos dando la cara».

Aseguró que ni él ni el resto de miembros del partido tienen «miedo de salir a ningún lado. Pedimos permiso a la JEP y tenemos libre movilidad». Recordó, además, su captura, que fue calificada de «secuestro», en Caracas por orden del expresidente Álvaro Uribe cuando ocupaba la Presidencia. «Hay gente interesada en golpear a la JEP y con esto están golpeando a la JEP misma», destacó.

La orden responde al secuestro y muerte en 2005 de la ciudadana paraguaya Cecilia Cubas, hija del expresidente de ese país Raúl Cubas Grau y de la exsenadora Mirta Gusinky. Paraguay acusó a las FARC-EP de ayudar a la guerrilla paraguaya que llevó a cabo el secuestro.

Tras conocerse que Granda había sido retenido en el aeropuerto mexicano, el ministro de Defensa colombiano, Diego Molano, aseveró que la captura se produjo «por circular roja de Paraguay por secuestro, asociación criminal y homicidio doloso».

Además, Molano ratificó que Interpol Colombia «no está facultada ni tiene acceso para modificar, aclarar o cancelar la información publicada por otros países».

Por su parte, el senador de Comunes Carlos Antonio Lozada detalló que, pese a contar con autorización de la JEP, Granda fue capturado cuando estaba en compañía del presidente de la formación, Rodrigo Londoño, y de otros compañeros que iban a participar en un seminario internacional sobre “Los Partidos y una nueva sociedad”, «donde uno de los temas a tratar es el proceso de paz en Colombia».

«La petición de extradición llegó a última hora»

El Gobierno mexicano explicó ayer que el aviso de Paraguay para detener y extraditar a Rodrigo Granda llegó a última hora y no pudo «considerase» hasta que el antiguo guerrillero ya estaba de regreso en Colombia. «Las autoridades de Paraguay se comunicaron con México para solicitar la detención y extradición a Paraguay del señor Granda durante la noche del 19 de octubre. Sin embargo, el interesado ya salió de México antes de que la petición pudiera ser considerada», explicó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Según explicó la Cancillería mexicana, la Interpol subió una alerta para su retención a la 12.05 (hora local) mientras la delegación colombiana volaba hacia México. «Tras ser retenido, se hicieron las gestiones internas y se notificó que sí se le concedía el ingreso a México. Sin embargo, el interesado determinó regresar a Colombia, por lo que retornó a su país a la 01.35 hora local del 20 de octubre de 2021», detalló la SRE, que insistió en que «el Gobierno de México reitera su apoyo al proceso de paz en Colombia». GARA