Los sindicatos del Metal de Bizkaia advirtieron ayer de que si persiste el bloqueo «total» que, tras siete reuniones, mantiene la patronal del sector para la negociación del nuevo convenio, recurrirán de nuevo a la «confrontación». Como en 2019, no descartan ir a la huelga.

Así lo expusieron ayer en rueda de prensa Mikel Etxebarria, del sindicato ELA, Iratxe Azkue, de LAB, Marta Ayala, de CCOO, y Jose María Rojo, representante de UGT, acompañados por miembros de ESK, CGT y USO, sindicatos que no están presentes en la mesa de negociación.

Los cuatro sindicatos mayoritarios, ELA, CCOO, LAB y UGT, que sí forman parte de esa mesa negociadora, decidieron registrar este pasado lunes una plataforma conjunta en la sede del Consejo de Relaciones Laborales (CRL), en la que recogían las propuestas que trasladarán a la patronal en la reunión de hoy.

La plataforma va a exigir medidas como incrementos salariales por encima del IPC, la descongelación de la antigüedad, la reducción de jornada y limitación de la flexibilidad, así como la subrogación para todas las actividades, la obligación de aplicar el contrato relevo, limitar la contratación mediante ETT o la adecuación de las licencias retribuidas.

Igualmente, reclamarán medidas de salud laboral para hacer frente al problema del amianto y mejoras en las indemnizaciones por incapacidad y muerte derivadas de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales. También plantearán la regulación del teletrabajo o medidas de igualdad.

Ante la subida del gasto de la energía, Azkue explicó que desde la patronal les han pedido «moderación» en sus peticiones, pero defendió un reparto justo de la riqueza. La representante de LAB explicó que los trabajadores sufren un aumento del 25% en gastos de vivienda, energía y otros aspectos de la vida cotidiana, un 17% en transporte y cerca de un 6% en la cesta de la compra. «Ellos lo que nos están pidiendo es que se vaya a trabajar perdiendo dinero», resumió. «La lectura catastrófica que quiere hacer trasladar la Federación Vizcaína de Empresas del Metal a la opinión pública no es tal», defendió Azkue, ya que «desde el Gobierno Vasco se habla de crecimiento económico del sector industrial». Así, exigen un incremento del salario superior al IPC en un 1%.

Asimismo, Etxebarria remarcó que «ahora la pelota está en el tejado de la patronal» y que los sindicatos no van a aceptar que se siga bloqueando la negociación. Además, interpelaron a las empresas que saben que forman parte del Comité Ejecutivo de la FVEM, como Tecuni, Arteche, ITP, Sidenor, Eldu, Ormazabal o Astilleros Murueta: «Está en vuestra mano evitar la conflictividad y el escenario de huelgas y confrontación».

Huelgas

Con todo, los sindicatos remarcaron que si no se activa una negociación real «llamarán a todos los trabajadores del sector a exigirlo desde sus empresas y desde la calle». Y recordaron que el convenio sectorial del Metal fue rescatado en 2019 gracias a la movilización de miles de personas trabajadoras que participaron en las sucesivas huelgas.

De esta manera, señalaron que todavía hay trabajadores del Metal que «están sufriendo el acoso judicial» desde aquellos paros. En este sentido, recordaron que el 7 de junio todos los sindicatos del Metal, junto con la plataforma de encausados por conflictos laborales, se concentrarán frente la Audiencia de Bizkaia en solidaridad con Aitor y Arkaitz, dos trabajadores del sector que serán juzgados ese día.

La plataforma mostró también su «solidaridad y su fuerza» a los huelguistas del Metal de Araba, que realizarán hoy su tercer día de huelga. En esa línea, Etxebarria recordó que «su lucha también es la nuestra».

Anterior convenio

El último convenio del sector del Metal firmado en Bizkaia se logró después de diez jornadas de huelga, data de 2019 y afecta a 52.000 trabajadores. Antes había dos convenios vigentes, uno finalizado en 2003 y otro de eficacia limitada del 2008 al 2011. «Se daba la paradoja de que había muchos trabajadores que estaban regulados por el convenio de eficacia limitada, pero había otros que a los que se les aplicaba el de 2003», explicó Rojo, «por lo que nos encontramos con casos de salarios congelados», añadió.

El representante de UGT denunció que el último convenio se negoció «de una manera muy rápida» por lo que «se quedaron cosas en el tintero». La plataforma comentó en este sentido que, entre las cuestiones a mejorar, se encuentra la descongelación de la antigüedad.

Además, piden ampliar y mejorar la comisión de igualdad que salió del último convenio, con el objetivo de «seguir trabajando en la brecha salarial existente» y «añadir medidas más concretas» como incluir al colectivo LGTBIQ+. Recordaron además que se está elaborando un diagnostico del sector por parte de personas especializadas y cuando ese trabajo esté terminado se podrá hablar de datos más concretos.