Las bolsas europeas se vieron paralizadas otra vez por el temor a la recesión. Esta vez, el jarro de agua fría vino con los datos de actividad manufacturera y de servicios de ambos lados del Atlántico. Pero los índices preliminares PMI de junio siguen esquivando la zona de contracción al superar los 50 puntos, línea que le separa de la expansión, muestran una clara desaceleración y unas perspectivas preocupantes. En la zona euro, el PMI compuesto cae hasta los 51,9 puntos, desde los 54,8 puntos de mayo. También bajan los índices de las manufacturas y los servicios. Esta tendencia también se da en EEUU, donde la actividad manufacturera se quedó en 52,4 puntos, frente a los 57 puntos anteriores, y la referencia del sector de los servicios pasa de los 54,3 puntos de mayo hasta los 51,6 puntos.

Los inversores escucharon de nuevo al presidente de la Fed. Los analistas vieron una mayor decisión al asegurar que es incondicional la lucha contra la inflación y que el aterrizaje suave es un gran desafío.

El Ibex, en su tercera jornada con pérdidas, se dejó un 0,48%, y hoy comenzará con 8.106,40 puntos. Las caídas se extendieron por París (-0,56%), Fráncfort (-1,76%), Milán (-0,80%) y Londres (-0,97%). Los índices abrieron al alza en Nueva York y así seguían al cierre en Europa, liderados por el Nasdaq 100, que ganaba más de un 1%.

En el Ibex, los más castigados fueron los bancos. Cayeron Bankinter (4,94%), Sabadell (4,81%), Caixabank (4,78%), Santander (3,17%) y BBVA (2,96%). Iberdrola (+3,83%), Grifols (+3,02%), Ferrovial (+2,45%) y Telefónica (+1,92%) lideraron las subidas.