EDITORIALA

Ponerse en marcha para subirse a la ola escocesa

Centenares de personas iluminarán esta noche más de 300 cimas de todo el Pirineo, convocadas por Gure Esku en Euskal Herria y por la ANC y otras entidades en Catalunya. Lo harán con el objetivo de unir sus reclamos a favor del derecho de las naciones sin estado a decidir su futuro político de forma democrática. Hacerlo juntos, pese a las dificultades que implica logística y organizativamente, supone ensayar un camino que tiene el potencial de cambiar el marco en el que hablamos de las luchas soberanistas de estos dos pueblos. Llegado el momento, es importante poder explicar que no hay un problema vasco o un problema catalán, sino que el problema es con la democracia, y lo tiene el Estado español.

Es cierto que, tras el clímax vivido hace ahora cinco años en el Procés, el momento no es el mejor para las organizaciones civiles soberanistas. El tema ya no está tan presente en la agenda mediática, cuesta hacerse hueco y el contexto, tanto en el Estado español como en Europa, ha cambiado muchísimo en un lustro. Pero por eso es, si cabe, más importante mantener viva la llama del derecho a decidir, recordar que la demanda democrática sigue vigente y hacerlo de forma festiva, como se hará hoy en las cumbres pirenaicas.

Porque se equivocarán en Madrid, París y Bruselas si piensan que esto ya se acabó. Las mayorías sociales a favor del ejercicio del derecho a decidir pueden estar parcialmente desarticuladas ahora mismo, pero siguen existiendo, y el tema regresará a la agenda, probablemente más pronto que tarde. El anuncio del nuevo referéndum escocés tiene flecos por aclarar todavía, pero vuelve a situar en un horizonte cercano, temporal y geográficamente, el ejercicio práctico del derecho a decidir. Con Londres fuera de la UE, será ciertamente interesante seguir los posicionamientos europeos y los malabarismos a los que, probablemente, se verá abocado el Estado español. Y será importante llegar con la máquina bien engrasada a la cita, para tratar de subirse a la ola todo lo que se pueda. Que el ascenso a las cumbres del Pirineo esta noche sirva para empezar a ponerse en forma.