Ander Herrera no está teniendo el papel protagonista en el equipo del que disfrutó a lo largo de la pasada campaña, pese a que por entonces tuvo que sobreponerse a sus problemas físicos. Con la llegada de Valverde, el centrocampista sí que gozó de la titularidad en una escuadra en la que estaba llamado a ser una pieza importante, pero en las últimas jornadas ha ido perdiendo ese papel en beneficio de otros compañeros.

El propio futbolista reconoció en sala de prensa que tiene que mejorar algunos aspectos de su juego para volver a recuperar la confianza del míster rojiblanco. Entre ellos, el de ser bastante más efectivo de cara a la meta contraria y recuperar el «oportunismo» del que siempre ha gozado cuando se ha aproximado al área rival.

«Siempre ayudo y me ofrezco en la salida de balón. Esa es una de mis virtudes, pero tengo que mejorar, no tanto en la llegada al área, sino en llegar bien, con opciones de hacer gol. Son cosas que tengo que aprender de ellos», en referencia a otros jugadores del Athletic, que sí que se han mostrado letales frente a los adversarios, caso de «Aduriz, De Marcos o San José», citó.

La Rosaleda podría ser un escenario propicio para que Herrera volviese a dejar patente su condición anotadora, ya que el estadio malacitano no es una plaza que al Athletic se le dé muy bien últimamente. «Creo que llevamos sin ganar en Málaga desde 2001, aunque también es cierto que han estado en Segunda algunas de esas temporadas, pero es cierto que se trata de una oportunidad muy bonita», destacó el jugador.

Para cambiar esa negativa estadística, el cuadro vizcaino también deberá mejorar el bagaje visitante de la actual campaña, uno de los apartados claramente a enriquecer. «No hemos sido un equipo regular fuera de casa, a diferencia de San Mamés, puesto que solo hemos conseguido ganar en Valladolid y Getafe. Además, hablando de aspectos puramente futbolísticos, el juego que hemos mostrado es claramente mejorable», reconoció.

«No sé por qué hemos tenido esa regularidad en casa y fuera, no. A veces, el fútbol tampoco tiene una explicación clara. Lo que hay que meterse en la cabeza es que, si queremos estar arriba, debemos ir a ganar a todos los campos», recalcó.

Ambición y prudencia

Porque ese es el objetivo, que el equipo se clasifique para alguna competición continental y, si puede ser, la previa de Champions, a la que accedería consiguiendo el cuarto puesto. «Se nos debe exigir porque tenemos capacidad para estar entre los seis o siete primeros, ganar fuera de casa es lo que nos tiene que llevar a estar en Europa al final de la temporada. Tenemos que pensar de manera optimista en el sentido de que podemos ganar en todos los campos. Quien quedó el año pasado cuarto ganó muchos encuentros lejos de su estadio», corroboró.

En todo caso, esa ambición debe estar acompañada de su correspondiente dosis de cautela. «Lo que pido al grupo de puertas hacia dentro es prudencia porque el año pasado hablamos de Champions y nos dimos un golpe que hasta tres jornadas del final no estábamos salvados. Hay que ser cautos y prudentes porque el año es largo, pero también es muy bonito que la gente tenga ilusión», advirtió Herrera.