IÑAKI LEKUONA
PERIODISTA
AZKEN PUNTUA

Hablar en pasado

Expresarse en euskara, en bretón o en catalán, es hablar en pasado, volver a la Edad Media. Así lo aseguró la UMP el pasado miércoles, durante el debate de una proposición de ley socialista para la ratificación de la Carta Europea de las Lenguas Minorizadas, propuesta que se votará mañana. Según el diputado Henri Guaino, estampar la firma en ese papel -que acepta tan sólo 39 de las 98 medidas de la Carta-, representaría «regresar a los señoríos y los feudos de la Edad Media».

Quiere Henri Guaino que su Francia no hable en pasado, pero parece olvidar que el futuro ya no es suyo. Porque muy a su pesar, su porvenir es más «cool» e indefectiblemente más «sexy», y pasea su francés en «jeans», «shorts», «leggins» o «t-shirts», y conversa en «chats» por sus «smartphones», y se conecta con operadoras muy francesas como «Free». Porque, lo quiera o no, su futuro es algo más «sport», y hace «footing» el «week end», y juega al «football», al «rugby», al «handball» o al «hockey», ya sea «outdoor», «indoor» o en la «play», y se va por ahí de «trekking» y de «camping».

Y ese futuro, un tanto «broker», que estaciona su modelo break en «parkings», que masca «chewim-gum», que se zampa «hot-dogs» mientras devora esos «shows» de «prime-time» como «Star Academy», ese futuro de «marketing» y de «sponsors» que se pronuncia ahora en la lengua de Molière es en realidad un «remake» de una historia que por estas tierras se viene escuchando desde hace tiempo en francés y con métodos extremadamente expeditivos. Por ello, sea cual sea el resultado de la votación de mañana, el euskara seguirá teniendo futuro. A pesar del francés y de monsieur Guaino, que por cierto, es todo un «freaky» que parece llegado del pasado.