Iñaki IRIONDO

EH Bildu propone crear una ponencia para asumir la competencia penitenciaria

El Parlamento de Gasteiz debatirá mañana en comisión la propuesta de EH Bildu de crear una ponencia que analice la asunción y el ejercicio de la competencia en materia de política penitenciaria, reconocida en el artículo 12.1 del Estatuto de Autonomía y no transferida por el Gobierno español después de más de treinta años. La viabilidad de la propuesta depende del voto del PNV en una materia que históricamente ha venido reclamando y reclama Lakua.

El Parlamento de Gasteiz debatirá mañana, a propuesta de EH Bildu, si constituye una ponencia que analice la asunción y el ejercicio de la competencia en materia penitenciaria. La coalición independentista quería que el debate se produjera en el pleno de la Cámara, pero la Mesa decidió trasladarlo a la Comisión de Instituciones, Seguridad y Justicia.

El parlamentario Julen Arzuaga, firmante de la iniciativa, considera necesario hacer una profunda reflexión sobre el sistema penitenciario y explorar modelos más modernos y alternativos para el actual cumplimiento de las penas. Para ello, el primer paso ineludible es contar con una competencia reconocida por el Estatuto de Autonomía pero que Madrid lleva más de treinta años negándose a traspasar.

La transferencia de la política penitenciaria es una reivindicación histórica tanto del Parlamento autonómico como del Ejecutivo de Lakua. De hecho, figura en el programa de gobierno de Iñigo Urkullu.

La posibilidad de que la creación de la ponencia se apruebe dependerá del voto del PNV, formación que aseguraba ayer que todavía no había tomado una decisión al respecto. El PSE es el único grupo que ha presentado una enmienda, que se limita a pedir que se mantenga la colaboración con Instituciones Penitenciara y a no renunciar a la transferencia. Todo hace indicar que junto al PSE, también PP y UPyD se opondrán a la iniciativa de EH Bildu.

Una cárcel más humana

La proposición de EH Bildu surge de los testimonios que asociaciones como Salhaketa han relatado ante el Parlamento y a los sucesos ocurridos en prisión que cada cierto tiempo escandalizan a la ciudadanía, como las muertes de presos, la última esta misma semana en la cárcel de Burgos, donde falleció un recluso guipuzcoano de 22 años.

En este contexto, el parlamentario Julen Arzuaga propone crear un ámbito, como la ponencia, en el que reflexionar sobre si el actual sistema penitenciario cumple con los objetivos de reinserción, o si es posible mejorarlo para hacer la cárcel «más humana». Analizar si la estancia en prisión ayuda a la persona presa a su futura integración en la sociedad o si, por el contrario, la aparta todavía más de ella. También propone estudiar si existen experiencias de modelos alternativos más modernos para el cumplimiento de las penas.

EH Bildu recuerda que el artículo 12.1 del Estatuto contempla como competencia propia la «ejecución de la legislación del Estado en materia penitenciaria», pero que esta no ha sido todavía transferida, al contrario de lo que ocurre en Catalunya. Esto supone que aunque el Gobierno de Lakua tenga «buena voluntad» para realizar actuaciones de apoyo a la resocialización de las personas presas y de sus recorridos laborales, son programas que quedan en un segundo nivel.

EH Bildu entiende que la reclamación de la competencia en materia de política penitenciaria por parte de las instituciones de la CAV, debe ir acompañada de un programa claro y consensuado en el Parlamento sobre lo que se quiere hacer con dicha competencia y la forma en la que se puede poner al servicio de la reinserción real de las personas presas.

Agreden a Raul Aduna en el Palacio de Justicia de París

El preso gasteiztarra Raul Aduna fue agredido por un funcionario del Palacio de Justicia de París el pasado 8 de enero, según informó ayer Etxerat, quien añadió que ha tenido serias dificultades para recopilar información de estos hechos.

Aduna rechazó compartir celda con un preso común y se sentó en el suelo como forma de resistencia pasiva, mientras reclamaba la presencia de un responsable. Anda no recuerda bien qué sucedió a continuación debido al alto grado de tensión que se vivió, hasta el punto de que no es capaz de confirmar si perdió el conocimiento o no. En cualquier caso, relató que le arrastraron por un pasillo, que le levantaron «como un muñeco» tras agarrarle de la papada y que acabó en el suelo sin saber exactamente cómo, según el testimonio que difundió Etxerat.

Recibió golpes en la cabeza y por detrás. Posteriormente, el mando de los funcionarios acudió a su celda y le acusó de agresión, por lo que le impusieron 20 días de «mitard», que quedaron en suspenso, por lo que no los tendrá que cumplir.

Etxerat calificó estos hechos de muy graves y destacó que reflejan la tensión que padecen los presos vascos.

Por otra parte, Ander Mujika, vecino de Donostia, ha permanecido cinco semanas en la celda de castigo de Bourg-en-Bress. Etxerat denunció que esta medida supone un agravamiento de las condiciones de vida de los presos, conculcando derechos básicos.

En defensa de los derechos de los presos, ayer se registraron concentraciones en Santurtzi (57) y Atarrabia (40). GARA